Aprobado y listo el proyecto electoral del titular de la Comisión Federal de Electricidad, perdón, del presidente Andrés Manuel López Obrador, y, de pasar también por sobre la legalidad de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, las próximas elecciones para la Presidencia de la República estarán bajo el control absoluto de Morena las siguientes actividades:
Una nueva elaboración del padrón nacional de electores, el conteo de votos de acuerdo con sus criterios y sistemas de vigilancia ciudadana que, ¿alguien lo duda?, estarán integrados por grupos afines…
Además, tendrán manejo indiscriminado de los multimillonarios gastos, con destinos similares a la discreción con que los manejaron los gobiernos neoliberales que tanto odia don Andrés y a los que por muchos años sirvió Manuel Bartlett Díaz, por cierto, al que se le cayó el célebremente triste sistema…
También habrá nuevos consejeros que se someterán a las reglas que les dictarán desde la nueva estructura que sustituirá a lo que hoy se llama Instituto Nacional Electoral, con personal de nuevo ingreso que no huela nada a los Oples de ahora, ni al Servicio Profesional Electoral…
Es decir, será un nuevo organismo solo con tufo a la mal llamada 4-T y al más puro estilo ideológico del inquilino de Palacio Nacional…
¿Cuál?, se preguntará usted, grilloso lector, y una vez más le decimos que, como dice don Andrés, hay se los dejo de tarea…