El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que lo ideal ahora es que todos los que quieran ingresar a la universidad puedan hacerlo y que se supriman los exámenes de admisión, que se garantice el derecho a la educación, porque la educación no es un privilegio, es un derecho del pueblo.
Y añadió: “En el periodo neoliberal precisamente se utilizó como pretexto el que los jóvenes no pasaban el examen de admisión y se les rechazaba, eso fue una constante; y no es cierto, fue una mentira, no es que no pasaran el examen de admisión, es que no había espacios porque no había presupuesto en las universidades, porque el propósito era poner la educación al mercado como si fuese una mercancía, privatizar la educación.
“¿Qué sucedió?
“Que se dejó de invertir en educación pública. Se hacían los exámenes, hasta en la UNAM. Si solicitaban su ingreso 10 mil para entrar a medicina, decidían que iban a aceptar 500; entonces aplicaban un examen con 120 preguntas y resolvían que iban a ingresar los que contestaran bien 118, el que contestaba bien 117 preguntas no pasaba.
“Entonces, no es que reprobara el examen, es que no había espacio, no había cupo. Entonces, eso fue lo que prevaleció por tres décadas, se rechazaban 300 mil jóvenes por año de universidades públicas y creció de esta manera la matrícula en escuelas privadas; pero llegó también un momento en que dejó de crecer la matrícula porque por muy poco que se pague de colegiatura en una escuela privada, la mayoría de los mexicanos tiene para pagar colegiatura, es decir, los padres no tienen para pagar la colegiatura de sus hijos.
“El salario de un trabajador promedio es de cuatro, cinco mil pesos, y una colegiatura, por muy barata, son tres mil pesos mensuales; entonces, se excluye a los jóvenes y no pueden estudiar, y esto afecta a los que tienen menos ingresos”.