El presidente de la Comisión de Participación Ciudadana del Congreso capitalino, Martín Padilla Sánchez, afirmó que alrededor de 6 mil 754 personas viven en situación de calle en plazas públicas, jardines y edificios abandonados de la Ciudad de México, por lo que es un sector vulnerable que se encuentra en grave riesgo de contagiarse del virus de COVID-19.
El legislador de Morena pidió a la Secretarias de Inclusión y Bienestar Social y de Salud de la capital del país, Almudena Ocejo Rojo y Oliva López Arellano, respectivamente, establecer un esquema de trabajo para llevar a cabo las acciones necesarias para proteger a la totalidad de las personas que vive en las calles de las 16 alcaldías de la Ciudad, de las cuales 4 mil 354 se localizan en espacios públicos y 2 mil 400 en albergues públicos o privados.
De acuerdo con el Censo de Poblaciones Callejeras 2017-2018 realizado por la Secretaría de Desarrollo Social de la Ciudad de México, en la capital existen 6 mil 754 personas en la calle siendo el 87.27% hombres y 12.73% mujeres, agregó.
“Es importante que se envíen brigadas médicas y de apoyo a este sector que vive en calles de la capital, ya que ante esta contingencia puede contagiarse de manera más fácil al no tener ningún cuidado por las condiciones de pobreza en las que se encuentran”, expresó el también integrante de la Comisión de Derechos Humanos del Congreso de la Ciudad de México.
El diputado Martín Padilla comentó que las alcaldías que cuentan con mayor presencia de población callejera son Cuauhtémoc, Gustavo A. Madero, Venustiano Carranza e Iztapalapa.
“Es fácil detectar a las personas en esta situación, porque se encuentran concentrados en algunos puntos, principalmente en el metro Hidalgo, el metro Revolución, las calles de San Fernando y Mina, la Alameda Central, Plaza de la Ciudadela, el Teatro Blanquita, la Plaza Garibaldi, la Avenida Paseo de la Reforma y Plaza Francisco Zarco, entre otros espacios, agregó.
Este sector de la población está conformado por familias, personas jóvenes, mujeres, niñas y niños, adultos mayores y personas con discapacidad, por lo que se vuelve un grupo muy vulnerable que necesita observación y atención médica para para garantizar su salud ante la pandemia.
“Estos grupos son considerados vulnerables no solamente por la nula o precaria atención en los rubros de salud, educación y trabajo, sino también porque son discriminados y agredidos constantemente”, finalizó.