Por Efrén Páez Jiménez
(dpl news) Sergio Díaz-Granados, presidente ejecutivo del Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF), advirtió que América Latina y el Caribe no puede seguir “distraída” en sus problemas crónicos, sin entender la importancia de la transformación digital. El directivo reconoció, sin embargo, que se requiere de grandes montos de inversión y la colaboración entre múltiples instancias para poder aprovechar los beneficios que ofrece el sector.
Durante su presentación en el pasado Digital Summit Latam, Díaz-Granados aseguró que “la región no va a alcanzar su pleno potencial si no aprovecha esta primavera digital”. Recordó que América Latina y el Caribe no reconoció el impacto que tuvo la presentación del iPhone en 2007 al estar distraída en sus problemas crónicos como bajos flujos de inversión, déficit fiscal o reformas estructurales.
“Yo creo que se está viviendo nuevamente ese momento en la región. Estamos muy distraídos discutiendo los temas seculares que tenemos de bajo crecimiento, los problemas de pobreza, los problemas de informalidad. Se piensa que simplemente eso va a llegar por ósmosis o por porosidad en algún momento. Pero tenemos que acelerar esa conciencia y el compromiso en América Latina para aprovechar al máximo esta revolución”, apuntó.
Advirtió que el observatorio de economía del ecosistema digital de CAF sitúa a la región en un desarrollo intermedio, ya que se observa una tendencia de crecimiento por debajo de otras regiones emergentes, en especial respecto al sur de Asia o Medio Oriente.
Según el directivo, se estima que hay una brecha de inversión en la región latinoamericana de 120 mil millones de dólares hacia 2030 para alcanzar al resto del mundo. “Esa plata no la tienen nuestros países porque están severamente golpeados fiscalmente y no tienen el margen para hacer ese cúmulo de inversiones”. En ese sentido, hizo un llamado a establecer un marco regulatorio y estímulos que permitan a la inversión privada hacer su trabajo.
Pese al panorama, Díaz-Granados también identificó importantes oportunidades de crecimiento en la región, incluyendo la brecha digital de aproximadamente 30 por ciento de la población, la posibilidad de incrementar la participación en la cadena de valor de semiconductores, una mayor atracción de inversión en Centros de Datos, o hasta proveer energías limpias para el sector digital.
También señaló el potencial que tiene la región para proveer de minerales y metales, requeridos tanto para semiconductores como para soluciones de energías renovables.
Para abordar estos retos, CAF ha impulsado múltiples iniciativas con socios locales. Por ejemplo, se ha apoyado a la Universidad Tecnológica de Panamá en la creación de un centro de tecnología avanzada en semiconductores, que aprovecharía la posición estratégica global de Panamá.
En Inteligencia Artificial, el banco también busca atender la falta de modelos de lenguaje desarrollados de forma local, ya que las opciones actuales no reconocen “nuestra idiosincrasia, nuestra historia, nuestra cultura, nuestro mestizaje, […] y crea contenidos imprecisos que perpetúa sesgos, limita la información y, en última instancia, rezaga su potencial”.
En este caso, se apoya al Centro Nacional de Inteligencia Artificial en Chile con la colaboración de más de 30 instituciones y expertos de la región para crear un modelo de guía latinoamericano y una guía práctica de diseño de políticas públicas para IA con datos propios y abiertos representativos de la región.
Por otro lado, reconoció las inversiones en Centros de Datos que han llegado, donde el banco busca complementarlas con inversión en fibra óptica y de generación de energía requeridas para su funcionamiento, y que pueden cerrar la brecha de infraestructura.
Destacó también el desafío de la ciberseguridad, al señalar que de “los 15 mercados criminales que hay en el mundo identificados, América Latina tiene cerca de 11 ó 12, en los cuales está entre los primeros lugares”, lo que expone muchos riesgos a la infraestructura. “Estamos dando seguimiento para dar más fortalecimiento institucional y de capacidades a nuestros países. Queremos financiar infraestructura de seguridad que proteja infraestructuras críticas como energía, transporte, agua, cadena logística y los datos que están en las finanzas públicas”, dijo.
Finalmente, consideró que es importante fortalecer las alianzas y la colaboración entre distintos actores como gobierno, empresas, y academia, pero también impulsar la colaboración de América Latina y el Caribe con otras regiones como Europa, de las que se pueden aprender las políticas requeridas para el cierre de brechas.
En los próximos meses, se darán algunas reuniones y conferencias que podrían ayudar a la región a discutir temas como la movilización de recursos financieros, alianzas público-privadas y el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Por ejemplo, habló sobre la oportunidad que brinda la cumbre de ministros de Economía de América del Sur a realizarse en Sevilla, donde se discutirá el financiamiento para el desarrollo; así como la IV Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) y la Unión Europea (UE) que se realizará en Colombia, donde se podrá discutir el lanzamiento de Global Gateway, una iniciativa de la Comisión Europea para invertir hasta 300 mil millones de euros en los sectores digital, energético y de transporte.