Por Paula Bertolini
(dl news) Los países de América Latina saben que la regulación de la Inteligencia Artificial (IA) es un desafío que no pueden enfrentar solos, que requiere coordinación y un esfuerzo multilateral.
Por eso se está desarrollando esta semana en Chile el Foro sobre la ética de la Inteligencia Artificial en América Latina y el Caribe, que organizan la Unesco, CAF y el Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación de Chile. En el marco del encuentro, este martes 24 de octubre se constituirá el Consejo Regional de IA.
En la apertura, Alberto van Klaveren, ministro de Relaciones Exteriores de la República de Chile, dijo que el mero hecho de que las discusiones sobre IA se encuentren fuertemente concentradas en el hemisferio norte puede presuponer un sesgo al excluir a las naciones del sur global.
“Iniciativas como esta son claves para aumentar la representación de América Latina y el Caribe en las discusiones globales sobre estándares y principios para la IA a la vez que nos permite impulsar la soberanía de capacidades tecnológicas de nuestra región”.
“Entendiendo que este tema requiere de un esfuerzo multilateral, consideramos que las Naciones Unidas es la Organización idónea para promover y administrar mecanismos de supervisión y gobernanza acordados internacionalmente”, agregó el Canciller.
Por su parte, Gabriela Ramos, directora General adjunta de Ciencias Sociales y Humanas en la Unesco, afirmó que la región no llega en un segundo plano.
“Hemos aprendido que hay una acción decidida de las autoridades y grupos multisectoriales. Este foro busca posicionar la visión latinoamericana en este debate global. Y tenemos una voz muy sólida, fuerte”.
Ramos destacó las recomendaciones éticas de la IA que elaboró la Unesco, y que ya fueron adoptadas por 193 países. Además, el Organismo hizo 50 evaluaciones de impacto ético en distintos países, de los cuales 10 pertenecen a América Latina.
“Quien conduce realmente la IA tiene que ser el ser humano. Tiene que estar en el centro de toda la discusión”, opinó Sergio Díaz-Granados, presidente Ejecutivo de CAF. “Venir a esta conversación sobre no descuidar la IA lo hacemos sobre nuestras bases, que es que la tecnología esté al servicio de la agenda social, de la agenda verde y de la agenda digital. Hay que evitar que las agendas vayan por separado”.
Sobre la propuesta del Consejo Regional de IA, Díaz-Granados sostuvo: “Confiamos que este Consejo liderado por Chile seguirá consolidándose como la principal instancia política y técnica en la materia. Y a partir de este Consejo tenemos que plantearnos la pregunta cómo puede la IA ayudarnos a afrontar los desafíos que tenemos en la región”.
“Esto es un desafío que no podemos hacer solos. Lo tenemos que hacer en conjunto y en coordinación”, enfatizó Aisén Etcheverry Escudero, ministra de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación, Chile.
Afirmó que el país finalizó un proceso de participación para actualizar la política de IA y tuvieron un acercamiento sobre los principales “miedos” que produce la tecnología.
Por los empleos, transformación del trabajo que dejara los empleos obsoletos.
Miedo a que la IA afecte los derechos humanos.
Que los datos personales sean mal utilizados.
Que se debilite la democracia.
La discriminación.
Que se profundicen las desigualdades que hay en la sociedad.
“¿Cómo nuestros países se las van a arreglar para preservar nuestra cultura, idioma y nuestra propia visión del futuro con la IA?”, planteó la ministra.
CAF y Unesco extienden su compromiso de cooperación
En el marco del Foro, CAF y Unesco extendieron su compromiso de cooperación conjunta con el fin de impulsar el uso inclusivo y ético de la IA por parte de los gobiernos nacionales, subnacionales y locales de la región.
En junio pasado, ambos organismos firmaron un Memorándum de Entendimiento (MOU) que tiene una vigencia de ocho años. Según informaron, la alianza ya muestra logros, como estar trabajando con siete países prestando asistencia técnica específica:
Con Uruguay, Costa Rica y República Dominicana en la elaboración de políticas de IA.
Brasil y Chile en la puesta en marcha de modelos de experimentación normativa y desarrollo de talentos de IA.
Argentina y México con un modelo conceptual para construir laboratorios de uso sostenible de la IA.