El Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) condenó este martes la aprobación de nuevas leyes y decretos en Cuba para reprimir la libertad de expresión en internet y redes sociales.
"Estamos ante nuevas normas para reprimir la libertad de expresión. Ahora el Estado no solo contará con el Código Penal y el Decreto Ley 370, sino que también dispondrá de otra normativa específica, por ejemplo, para legalizar los apagones de internet y de telefonía, como los que ocurrieron el 11 y 12 de julio, que han sido internacionalmente denunciados", afirmó Yaxys Cires, director de Estrategia del OCDH.
El decreto ley, los decretos y las resoluciones publicados en la Gaceta Oficial de Cuba tipifican los incidentes de ciberseguridad y sus niveles de peligrosidad y califican como "difusión dañina" a los contenidos que "inciten a movilizaciones u otros actos que alteren el orden público".
Además, penalizan cualquier acción "contraria a la verdad y a la rectitud que perjudica a personas e instituciones del Estado", así como la divulgación de supuestas "noticias falsas", "mensajes ofensivos" y la "difamación con impacto en el prestigio del país".
Para el OCDH, una vez más el régimen promulga normas susceptibles de una interpretación tan amplia, que es evidente que son para perseguir a quienes disienten.
Le ley obligará a los operadores y proveedores a "minimizar los riesgos asociados al empleo de sus redes y servicios o interrumpir estos" cuando sean utilizados para transmitir "información falsa" o afecten la "seguridad colectiva, el bienestar general, la moralidad pública y el respeto al orden público (...) con independencia de la responsabilidad penal, civil o administrativa que se derive del hecho".
"Denunciamos que el gobierno cubano aprovecha esta nueva normativa para violar derechos importantes de los ciudadanos, al incluir normas tan amplias. Cualquier ciudadano que exprese libremente su opinión con respecto a la situación que se está viviendo en Cuba o cualquier crítica al gobierno, podría incurrir en una violación. Esto es algo que hay que condenar. Es otra vuelta de tuerca de la represión en Cuba", añadió Cires.
El OCDH pidió asimismo a las organizaciones internacionales de derechos humanos que denuncien este nuevo intento del régimen cubano de penalizar la libertad de expresión en la isla.