Por Alejandro González
(dpl Noticias) Tras el freno en 2020 de producciones de dispositivos electrónicos y automóviles debido al confinamiento por Covid-19, diversas industrias reactivaron ya sus actividades de manera acelerada, lo que ha detonado en la sobredemanda de chips y una eventual escasez.
La necesidad de llevar a todas las industrias hacia la transformación digital ha hecho también que la demanda de procesadores electrónicos se incremente, por lo que líderes de la industria prevén una escasez de estos, situación que podría normalizarse hacia finales de 2021.
Por ejemplo, Cristiano Amon, presidente Ejecutivo y CEO de Qualcomm, ha reconocido tal situación, y mencionó que se trata de un fenómeno de toda la industria y no únicamente de su empresa.
“La situación de la cadena de suministro, como dije anteriormente, ha alcanzado a toda la industria. No es exclusiva sólo de dispositivos portátiles como los teléfonos. También vimos la aceleración de la transformación digital en toda la industria y una recuperación con gráficas en forma de ‘V’, pero debería normalizarse hacia la última parte de 2021”, explicó el ejecutivo de Qualcomm.
Falan Yinug, director de Estadísticas de Industria y Política Económica de la Asociación de Industria de Semiconductores, dijo que durante 2020, lejos de que las ventas de chips se redujeran, se incrementaron 6.2 por ciento a nivel global, lo que demuestra la demanda que han tenido a pesar de la pandemia.
Yinug ejemplificó la escasez de chips con la industria automotriz, de la que dijo los chips han permitido construir autos inteligentes, seguros y eficientes; sin embargo, se ha visto afectada por la falta de semiconductores.
“La escasez es en gran parte el resultado de cambios sustanciales en la demanda debido a la pandemia y al mayor uso de semiconductores en vehículos avanzados. La industria de los semiconductores está trabajando diligentemente para incrementar la producción y satisfacer la demanda renovada”, afirmó.
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El representante empresarial afirmó que la alta demanda de chips y su escasez es una situación que ya atrajo el interés de políticos en Washington.
“El Congreso promulgó una legislación a principios de este año que pide incentivos federales para la fabricación de chips nacionales e inversiones en investigación de semiconductores para satisfacer esta creciente demanda.
Los formuladores de políticas ahora deben asignar fondos para estas disposiciones a fin de reforzar el liderazgo estadounidense en semiconductores, fortalecer la economía y la creación de empleo de Estados Unidos y hacer que las cadenas de suministro de semiconductores sean más resistentes a crisis futuras”, comentó Yinug.
De acuerdo con un reporte de Bloomberg, prevén que la escasez de chips eliminará 61 mil millones de dólares en ventas sólo para los fabricantes de automóviles, mientras que el impacto en la industria electrónica será mucho mayor, aunque no revelaron alguna cifra.
No obstante, puntualizaron que este mes General Motors Co. se vio obligada a suspender tres plantas norteamericanas, y Ford Motor Co. se prepara para una caída del 20 por ciento en el corto plazo.
El reporte de Bloomberg incluso señaló que Apple, quien es uno de los principales clientes de Qualcomm, dijo que las ventas de algunos nuevos iPhone de gama alta estaban limitadas por la escasez de componentes.
Asimismo, advirtió que NXP Semiconductors NV e Infineon Technologies AG de Europa han dicho que ya no sólo se trata de una limitante para la industria automotriz, mientras que Sony advirtió la posibilidad de no pueda satisfacer por completo la demanda de su nueva consola de juegos en 2021 debido a los cuellos de botella de producción.