Pero la ASF ni ve, ni oye
La diputada federal panista María Elena Pérez-Jaén Zermeño presentó en la Comisión Permanente del Congreso de la Unión una proposición con punto de acuerdo para exhortar al titular de la Secretaría de la Función Pública (SFP), Roberto Salcedo Aquino, para llevar a cabo investigaciones y auditorías, y así verificar la evolución del patrimonio de los titulares de las dependencias y entidades públicas de la administración pública federal, además de comprobar la veracidad de la información declarada en las respectivas declaraciones de situación patrimonial.
La legisladora, al argumentar su propuesta, refirió que la SFP debe dar seguimiento a la evolución de la situación patrimonial del servidor público y, en caso de advertir signos exteriores de riqueza notoriamente superior a los ingresos lícitos que el declarante pudiera tener, deberá realizar las investigaciones o auditorías que correspondan y así determinar si ese enriquecimiento es o no justificado, y acorde a los ingresos del servidor público.
Sin embargo, aseveró en un comunicado, en las últimas semanas ha quedado evidenciado que la SFP, su titular y sus subalternos, encargados de cumplir con esas atribuciones, han sido omisos con sus obligaciones y han dejado de verificar y supervisar la veracidad de la información que han proporcionado en sus respectivas declaraciones patrimoniales, y como ejemplo se tiene a anteriores y actuales titulares de las secretarías de Estado.
Además, la diputada federal recordó que los pasados 8 y 28 de mayo presentó denuncias en contra de Rocío Nahle García, exsecretaria de Energía, así como de Miguel Torruco Márquez, secretario de Turismo, por inconsistencias en sus declaraciones patrimoniales, ya que omitieron declarar vehículos, bienes inmuebles, y hasta su participación en empresas, incluyendo ingresos de las mismas.
Por otra parte, Pérez-Jaén Zermeño enfatizó que los bienes muebles e inmuebles de los funcionarios de la 4T aparecen y desaparecen de sus declaraciones patrimoniales, cambiando fechas de adquisición de los mismos, negando abiertamente participar en empresas, omitiendo ingresos diferentes a aquellos provenientes del servicio público, y todo ello con la complacencia de aquellos funcionarios que deberían estar abocados a vigilar y supervisar que los declarantes cumplan con su obligación constitucional y legal de informar respecto de su situación patrimonial con veracidad, probidad, transparencia y responsabilidad.
Hizo hincapié en que “esto lo ha venido informando a la opinión pública, al analizar y comparar sus declaraciones patrimoniales iniciales, de modificación y de conclusión de encargo, en las que se aprecia que a los funcionarios de la Cuarta Transformación se les olvida qué bienes tienen, desde cuándo los tienen y cuáles son sus especificaciones, o incluso olvidan que los tienen.
“Ha quedado demostrado, reiteradamente, que la Secretaría de la Función Pública y su titular, han dejado de cumplir con su mandato legal y no son más que un cascaron vacío, que le está fallando a los mexicanos en hacer frente al flagelo de la corrupción. El secretario de la Función Pública, Salcedo, será recordado como el secretario de la Penumbra Pública”, concluyó la diputada del PAN.