El presidente Andrés Manuel López Obrador insistió en que la corrupción se combatirá con mayo eficiencia, si se logra convencer al pueblo en general de que es algo que daña a la nación en su conjunto en lo personal, en lo familiar y en lo social.
Y añadió en una de sus mañaneras de la semana pasada:
“Además, tenemos que estigmatizarla, porque el peor de los males era que se robaba y ni siquiera perdían su respetabilidad, hasta se les aplaudía, en algunos casos hasta se les ponía de ejemplo, se les decía a los hijos: ‘Estudia para que cuando seas grande seas como don Fulano, un reverendo ladrón’.
“Entonces, que eso ya no, porque eso es una mancha que afecta, no sólo al corrupto, sino a toda la familia. ¿Y qué culpa tienen los hijos de que se les señale por lo que hicieron los padres?
“Entonces lo mejor es lo preventivo, lo mejor es tener en cuenta que sólo siendo buenos podemos ser felices, que la felicidad no es acumular bienes materiales, dinero, fama, grados académicos, como si fuesen títulos mobiliarios.
“La verdadera felicidad es estar bien con uno mismo, estar bien con nuestra conciencia y estar bien con el prójimo, esa es la transformación que se requiere”.