En airada reunión con directivos administrativos del Senado de la República, trabajadores de dos de los cuatro sindicatos del órgano parlamentario fueron olímpicamente rechazados en una de sus principales demandas planteadas, que es acabar con la corrupción que está llegando a niveles de escándalo histórico.
Los líderes sindicales se habían plantado en una de las oficinas del presidente de la Junta de Coordinación Política, Ricardo Monreal Ávila, con el propósito de solicitar un diálogo abierto y escuchara sus legítimas demandas.
Sin embargo, el senador morenista se enteró de este escenario y ordenó al director general de Recursos Humanos, Medel y la segunda de abordo Ruth Beltrones, para que acudieran en su lugar.
“Queremos que se acabe de una vez por todas la corrupción que se está anidando en todas las áreas del Senado de la República y se deje de favorecer a Bertha Orozco Márquez, porque sigue disponiendo a su arbitrio de los recursos del sindicato mayoritario, aun cuando ya no trabaja aquí”, les manifestaron a los funcionarios senatoriales.
Fundamentaron sus quejas y denuncias con la documentación que les entregó el Instituto Nacional de Acceso a la Información, INAI, donde se demuestra que el Senado de la República entrega al sindicato de Bertha mucho dinero que, además de no transparentar, no se justifica y solo obedece a las componendas que tiene concertadas con el grupo parlamentario de Morena, desde que este partido político se apoderó del organismo parlamentario.
La improvisada reunión entre trabajadores y directivos solo profundizó la inconformidad y se anuncian más movilizaciones para denunciar todo lo que está saliendo del INAI y que contradicen la honestidad de la que todos los días habla en sus mañaneras el presidente Andrés Manuel López Obrador.