Puede que hayas oído decir que el calostro es oro líquido, ¡y no solo por el color amarillento! A continuación, explicamos por qué es tan importante este primer alimento para tu recién nacido lactante.
El calostro, la primera leche que produces cuando inicias la lactancia, es el alimento ideal para un recién nacido. Es muy concentrado, está repleto de proteínas y tiene una alta densidad de nutrientes, por lo que con solo una pequeña cantidad conseguirás saciar el diminuto estómago de tu bebé. También es bajo en grasas, fácil de digerir y cuenta con componentes que inician su desarrollo del mejor modo posible. Y, tal vez lo más importante, tiene un papel fundamental a la hora de crear su sistema inmunitario.
El calostro tiene un aspecto más denso y amarillo que la leche madura. Su composición también es diferente, ya que está adaptado a las necesidades específicas de tu recién nacido.