El senador Joel Padilla Peña propuso reformar la fracción VI del artículo 61 de la Ley General de Salud, para establecer que forma parte de la atención materno-infantil, la atención del niño y su vigilancia durante el crecimiento y desarrollo incluyendo la evaluación del estado físico, nutricional y del neurodesarrollo durante la primera infancia.
El legislador señaló en su propuesta que es necesario extender la atención materno-infantil hasta la primera infancia, periodo que se extiende desde el desarrollo prenatal hasta los cinco años de edad, debido a que -como bien lo señala UNICEF- ésta es una etapa crucial de crecimiento y desarrollo de las capacidades físicas, intelectuales y emotivas de cada niño o niña. Es la etapa más vulnerable durante el crecimiento, pues es en esta fase, en la que se forman las capacidades y condiciones esenciales para la vida, la mayor parte del cerebro y sus conexiones.
La reforma propuesta busca: a) Prevenir posibles problemas asociados al retraso en el neurodesarrollo y la discapacidad, a través de la detección y atención oportuna; b) Garantizar a los niños con discapacidad, el acceso a servicios en materia de salud que puedan ayudarlos a rehabilitarse y desarrollar su potencial.
El senador colimense argumentó en su iniciativa que teniendo presente que la interacción entre los problemas de salud y los factores ambientales y personales hace que la experiencia de cada niño frente a la discapacidad sea diferente, la presente Iniciativa de Ley, también propone adicionar dos fracciones al artículo 64 de la Ley General de Salud para que en la organización y operación de los servicios de salud destinados a la atención materno-infantil, las autoridades sanitarias competentes:
- Desarrollen programas de intervención temprana en la infancia, los que estarán dirigidos a apoyar a los niños que están en riesgo de sufrir algún retraso del desarrollo o a niños que ya han sido diagnosticados con discapacidad.
- Establezcan acciones de orientación, información y psicoeducación a mujeres embarazadas, padres de familia y/o tutores sobre el desarrollo físico y salud del infante, su nutrición, desarrollo cognitivo, estimulación temprana, protección y cuidado.
“La reforma propuesta se enmarca dentro de las acciones que se han venido emprendiendo desde el Poder Legislativo para que las personas con discapacidad se desarrollen con mayor inclusión en la sociedad, se fomente su independencia y autonomía para alcanzar la igualdad de oportunidades”, resaltó.
La reforma también colabora para alcanzar la Agenda 2030 y sus Objetivos del Desarrollo Sostenible, fijada por Naciones Unidas en 2015 y de aplicación desde 2016, la que contiene 17 objetivos y 169 metas que cubren una diversidad de temas, incluyendo dentro de ellas el acabar con la desigualdad.
Finalmente, el senador Joel Padilla Peña indicó que Durango es un ejemplo en la atención materno-infantil, ya que la Ley de Salud de la entidad ya prevé que comprenda la vigilancia del crecimiento y desarrollo de los recién nacidos hasta los dos años de edad, así como detectar de manera temprana los problemas de neurodesarrollo y patología que pudieran tener, para lo cual se contará con una Cartilla Estatal de Neurodesarrollo, la cual se entrega de manera gratuita por las instituciones públicas y privadas del sector salud, acciones como esta colaboran a una detección pronta y oportuna de la discapacidad.
La iniciativa fue turnada para dictamen a las comisiones Unidas de Salud, de los Derechos de la Niñez y de la Adolescencia y de Estudios Legislativos.