De continuar las redadas ordenadas contra migrantes mexicanos por el temerario presidente de Estados Unidos, Donald Trump, las multimillonarias remesas que llegan a México desde ese país se verán dramáticamente reducidas, con el consiguiente empobrecimiento de miles de familias que dependen de esos ingresos…
Y esto es precisamente lo que tiene aterrada a la primera presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, porque ahora la carga del problema será para su gobierno, al tener la obligación constitucional de atender la enorme demanda de trabajo que se avecina por no poder negociar con su colega gringo la permanencia de los héroes y heroínas que tienen más de 10 años en espera de la entrega de sus papeles de legalidad migratoria.
Como se ve, la inquilina de Palacio Nacional tiene razón en estar más que preocupada, porque recuérdese que al inicio de este embate se mostró con capacidad suficiente, no solo para recibir con empleo a los compatriotas, sino a los centroamericanos que decidieran desistir del “sueño americano” y quedarse a radicar en México…
Incluso, doña Claudia se aventó el tiro de anunciar que ya tenía el acuerdo con muchos empresarios dispuestos a crear los empleos que fueran necesarios para enfrenar el problema y de ahí el alegre ofrecimiento con que salió a responder en todos los tonos a don Donald…
Las cosas, pues, de continuar la tendencia de las redadas y expulsiones de miles de mexicanos, se pondrán color de hormiga y aquí las estaremos reseñando, porque el panorama no es nada promisorio…