*Roma en Los Pinos
La otrora residencia presidencial, actualmente convertida en centro cultural empieza a hacer gala de sus actividades con la primera proyección de una película del laureado cineasta Alfonso Cuarón, quien se ha visto en medio de una nueva alternativa de exhibición cinematográfica en nuestro país.
Esto es, que dada las condiciones monopólicas que el sector de la exhibición comercial de filmes que persiste en los circuitos privados, Cuarón como director y Netflix como la productora han tenido que echar mano de una serie de alternativas para proyectar la película ROMA, que en ámbitos internacionales ha recibido reconocimientos y nominaciones.
Tal situación pone en evidencia el anquilosamiento que intereses comerciales mantienen con las uñas aferradas a la actividad cinematográfica, y hacen de ella un negocia para un duopolio desde hace ya varios lustros.
Cuarón y su productora están marcando, quizá sin proponérselo, una nueva brecha que seguramente muchos otros realizadores y productores de cine empezarán a experimentar, para el rescate de una producción más equilibrada y justa de nuestras películas, y la recuperación mejor remunerada de la inversión fílmica.
Por lo pronto, y cumpliendo con uno de los propósitos fundamentales de un centro de cultura popular Los Pinos y otros centros culturales son el escenario sobre el que se proyecta un cine anecdótico y plenamente identificado con nuestra idiosincrasia urbana.
La brecha está abierta, el camino a seguir marcado, la tecnología digital y los centros culturales son un nuevo binomio que proporciona grandes posibilidades en el sector de la exhibición cinematográfica.
Los tiempos de la Compañía Operadora de Teatros (COTSA) y ahora CINÉPOLIS junto con CINEMEX como las dos principales corporaciones exhibidoras de nuestro país, parece están llegando a un nuevo horizonte con una novedosa forma de exhibición que se adapta adecuadamente a las nuevas generaciones de cinéfilos.
-IMCINE y el conflicto de intereses
En el rubro de la producción, en este caso representado por el Instituto Mexicano de Cinematografía (IMCINE), se dan noticias de la nueva administración encabezada por la cineasta María Novaro, cuya trayectoria en nuestro cine tiene solidez, pero su relación con el anterior director Jorge Sánchez, con quien tiene una hija, ha creado una serie de suspicacias por el conflicto de intereses que esto provoca y señalan una parte del gremio cinematográfico, a pesar del apoyo que algunas instituciones como a Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas (AMACC) dirigida por Ernesto Contreras le han manifestado.
Es decir, se empieza con una notable división en el medio “de hecho” a causa de una falta de atención “al derecho”, según se plantea en este conflicto. Pareciera ser que una de las características de la administración Lópezobradorista es la de buscar conflictos innecesarios o gratuitos, ya que, sin poner en duda el talento de la Señora Novaro como realizadora; sin embargo, cabe preguntarse si es la única o última opción dentro de todo el ambiente cinematográfico, que pueda dirigir la institución.
-PILARES culturales de la CDMX
En el ambiente de la Ciudad de México, arranca la administración de la Dr. Sheinbaum con una propuesta cultural amplia y de alcances esperanzados al logro de una mayor expansión que proporciones una clara identidad cultural en sus diversas manifestaciones populares.
Desde luego destaca el impulso a la divulgación y rescate de la cultura de los pueblos indígenas a través de diversos festivales y exposiciones en la ciudad.
En materia de medios de difusión electrónicos está el proyecto de unir el Canal 21, el Canal del Congreso y Radio de la Ciudad de México. Se habla de eventos como Mujeres en Libertad, Festivales de Ritmos Mestizos.
Así, como un Festival de Unión y Diversidad, La Feria Internacional del Libro y Ciudad Lectora, entre una amplia actividad que se espera se empiece a desplegar en las diferentes alcaldías y con el apoyo de la Secretaría de Cultura y el fortalecimiento a colectivos culturales, mediante promotores y talleristas becados y ligados al nuevo El programa de Puntos de Innovación, Libertad, Arte, Educación y Saberes (PILARES).