*Reveladora confesión del titular de la SCJN
*¿Pone en camino a la cárcel a Felipe Calderón?
*Salva de más escándalo a AMLO y surgen dudas
Auténticamente reveladora esa versión que hizo pública la noche de este martes el actual presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, respecto a las presiones de que fue objeto para cubrir a los responsables del caso de la guardería ABC del IMSS en Sonora, donde en el 2009 murieron calcinados 49 bebés.
Pero lo que muchos políticos y especialistas se comienzan a preguntar, es porqué se tardó 13 años don Arturo para hacer estas acusaciones y si estará consciente de las repercusiones con que él mismo podría resultar, dado el altísimo nivel de gravedad, pues se trata de un asunto que podría escalar a hechos que todavía no prescriben y que asoman criminales complicidades.
Cuestión de reflexionar las siguientes palabras que soltó Zaldívar Lelo de Larrea en la presentación de su libro apenas esta semana del 2022:
“Operó Calderón para dejar impune el caso ABC; protegió a la familia de Margarita Zavala con una maniobra de Estado; A gritos, Gómez Mont me presionó para que cambiara la sentencia; el ex mandatario bloqueó ayuda médica para evitar escándalo mundial”.
Con una simple apreciación de lo anterior, el contenido de estas frases son contundentes y conllevan claro testimonio de delitos cometidos por un presidente de la República que estaba en funciones, el todavía panista Felipe Calderón Hinojosa, y más viniendo de un ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, quien conoce los alcances, no solo políticos, sino sociales, pero sobre todo, del nivel criminal en que incurrió el entonces habitante de la residencia oficial de Los Pinos, lo mismo que el también entonces secretario de Gobernación Fernando Gómez Mont.
Así las cosas, téngase por seguro que un asunto tan lastimoso, como fue la muerte de 49 bebés en el incendio de aquella guardería del IMSS en el norteño estado de Sonora, será utilizado por los políticos, morenistas y panistas principalmente, para hacerse garras en el parlamento y en cuanto tengan oportunidad.
Además, será tema que superará el escándalo de la casa gris en que está envuelto José Ramón López Beltrán, hijo mayor del presidente Andrés Manuel López Obrador, sin que tomen en cuenta el dolor que están sintiendo los padres y madres de los 49 bebés que perdieron la vida y que ahora serán utilizados por quienes aspiran a permanecer o alcanzar el poder y control nacional, cuando el sentimiento más noble debería ser sumar voluntades, sin reproches ni revanchas, para llevar el asunto a la vía legal y vigilar sin provecho político, que los involucrados y auténticos responsables paguen lo que hicieron de acuerdo con lo que resulten.
Es fácil adivinar el escenario de escándalo que viene, lo que confirmará que la política es sucia y sus actores perversos.