*¡Migración…otra vez!
Cual si fuesen amnésicos o faltos de quehacer, los diplomáticos de ambos lados de la frontera por enésima ocasión vuelven a poner la migración como tema central de la reunión entre los presidentes de México y Estados Unidos, como si realmente hubiesen avanzado o reformulado algo en ese aspecto en los últimos años.
El señor Biden conoce el tema mejor que nadie, durante sus largos años en el senado de su país colaboró en varios de los múltiples proyectos legales para la reordenación migratoria de los Estados Unidos a lado de personajes de la talla de Edward Kennedy o John McCain, y tal como los mismos políticos americanos lo califican el “sistema migratorio está desfondado” y la “frontera es la más porosa del mundo”.
Al parecer a muchos se les ha olvidado que Donald Trump, el 15 de febrero de 2019 firmó la “declaración de estado de emergencia nacional en la frontera”. El presidente justificó que la declaración era necesaria para proteger al país de una "invasión de drogas y criminales" procedente de México y que supone "un grave riesgo para la seguridad nacional"*. Y gracias a eso fue que logró obtener US$15.000 millones, una cantidad inferior a los US$25.000 millones inicialmente presupuestados para la construcción del muro.
Con todo y el multimillonario gasto que representó el capricho del muro, los resultados están a la vista; de enero de 2017 que se detuvieron a 461 mil 540 indocumentados, para fines de 2019 la cifra aumentó a un millón 13 mil detenidos. El muro quedó como un mal adorno del paisaje fronterizo.
Se ha dicho en todos los tonos que la migración no es asunto de ocurrencias, buenos sentimientos o conmiseración por el dolor ajeno; este es un fenómeno muy complejo y de aspectos multifactoriales que bajo un acuerdo multilateral puede organizarse y disminuir los índices de violencia, abusos, muertes y desgracias que lo caracterizan desde hace décadas, así como identificar y erradicar a las bandas y grupos de tratantes de personas y organizaciones criminales.
Quiero recordar que los “polleros” o coyotes de principio de siglo eran considerados casi como “hombres clave”, para la “pasada” al otro lado; ellos conocían los caminos y los horarios de la migra, tenían los contactos, conseguían el transporte, y orientaban a los “pollos” (migrantes) para llegar a su destino. Los costos no llegaban a los mil dólares y se tenía hasta tres oportunidades para pasar si en los dos primeros intentos algo salía mal.
No era la industria criminal que es ahora. Incluso se formaron grupos de ciudadanos que dejaban agua y comida por los caminos que aquellos recorrían y les auxiliaban en su trayecto. Los Ángeles del Desierto fueron uno de los más destacados y hasta la fecha siguen con su labor humanitaria, aunque muchos de ellos sufrieron penas de cárcel cuando se criminalizó la ayuda a indocumentados en los estados fronterizos.
La necesidad de la mano de obra extranjera (legal o ilegal), está reconocida desde la expansión de las trece colonias y por múltiples razones los políticos yanquis se niegan a reconocer y organizar ese fenómeno adecuadamente desde el fin de la II Guerra Mundial.
El mejor ejemplo de ello salió a la luz a raíz de los cambios generados por la pandemia del Covid-19: “Según las últimas cifras de empleos de la Oficina de Estadísticas Laborales, Estados Unidos tiene 11.3 millones de empleos abiertos, pero solo 5.9 millones de personas desempleadas. Eso es casi el doble de puestos vacantes que personas disponibles para ocuparlos”. Datos de la US Chamber of Commerce o Cámara de Comercio de los Estados Unidos**
“Esa cámara estadounidense quiere duplicar el número de trabajadores inmigrantes legales en ese país y propuso un plan de acción que incluye una reforma migratoria. Ésta incluye varias peticiones como la de duplicar el límite de visas de 140 mil, a 280 mil por año y la de no incluir en ese límite a esposas o hijos de los trabajadores como sucede ahora”**.
Como se puede apreciar, la propuesta que llevó el señor Andrés Manuel López Obrador y su equipo a la Casa Blanca nada tuvo de original o novedoso.
Es casi inconcebible que después de décadas de mantener programas temporales de trabajo exitosos con Canadá y con los propios Estados Unidos, no exista la voluntad de remediar los tremendos males que la migración ilegal genera.
Sin pretender escandalizar, pero sí resaltar lo trágico que es la migración, según información de la Organización Internacional de las Migraciones (OIM) de la ONU: “un mínimo de 810 personas sucumbió en 2019 mientras cruzaba desiertos, ríos y áreas remotas de las diferentes rutas migratorias del continente americano, convirtiendo a ese año en el más letal desde que se lleva ese tipo de registro.
“La OIM empezó a documentar las muertes de migrantes en América en 2014 y, de entonces, a la fecha ha dado cuenta de más de 3800 decesos, con 2019 como el año más fatal***. Y realmente creo que estos datos quedan incompletos por la cifra negra que representan los desaparecidos, asesinados o muertos en accidentes durante el trayecto.
Aquí se sigue celebrando como un éxito, como un logro sin igual la recepción de remesas, como si efectivamente pudiesen ser consideradas como producto de una estrategia o política económica del gobierno.
Durante 2019, el ingreso de México por remesas resultó de 36,439 millones de dólares; en 2020 llegaron 40,607md; para la totalidad de 2021, el valor de los ingresos por remesas fue de 51,594 millones de dólares, monto superior al de 40,607 millones de dólares reportado en 2020 y que significó una expansión anual de 27.1%. El flujo acumulado de los ingresos por remesas en los últimos doce meses (junio 2021 – mayo 2022) registró un nivel de 54,809 millones de dólares.
Con esos datos nadie quiere creer que hay mano negra en el envío de remesas. Cómo en 3 años pasamos de 36 mil millones a más de 54 mil, un crecimiento de más del 66% y ¡dicen que eso es legal!, que no existe intervención del hampa para esos datos, que todo eso es producto de los migrantes. Perdón yo si lo dudo, no tengo forma de comprobarlo, pero ya en otras ocasiones lo he señalado.
Cómo se explica ese crecimiento que no existe en la economía mexicana y mucho menos en la norteamericana, espero que alguien me oriente.
*https://www.bbc.com/mundo/noticias-internacional-54022541
**https://www.elfinanciero.com.mx/opinion/jonathan-ruiz/2022/07/11/amlo-echara-una-mano-a-eu/
***https://news.un.org/es/story/2020/01/1468662
****https://www.banxico.org.mx/publicaciones-y-prensa/remesas/%7BF96B9D6A-37F9-5764-AEFF-4D2A16054468%7D.pdf