*Vivir del cuento y en la raya
A pesar de las enfáticas declaraciones presidenciales negando la posibilidad de que México caiga en recesión económica aunque los datos disponibles así lo indiquen, parece que se ha optado por el autoengaño y propalar la próxima llegada de una bonanza económica que solo existe en la cabeza de la mandataria y sus allegados.
Expliquemos, “De enero a marzo de 2025, el Producto Interno Bruto (PIB) del país creció un 0,2% respecto al trimestre anterior”, según el Inegi, y pese a lo dramático del número resulta que mereció casi una celebración oficial si se le compara con la caída del -0.6% del último trimestre de 2024. Es decir ¿qué tan fregados andamos que hablar de un crecimiento rondando el cero ya se vuelve motivo de orgullo? Eso habla de que las cosas en la economía están mal… muy mal.
Bien señala el refrán que “no hay mal que por bien no venga”, resulta que según los conocedores: “El buen desempeño de las exportaciones y un alza en el sector primario, donde se concentran las actividades agrícolas y pesqueras, han evitado este escenario. De enero a marzo, los envíos mexicanos a EE UU no se frenaron, por el contrario, crecieron. Los exportadores aceleraron sus envíos ante el temor a los nuevos impuestos”*. Según esto, Trump lejos de causarnos un daño terminó beneficiándonos porque se aceleraron las compras antes de que entraran en vigor los erráticos aranceles o tarifas anunciados desde enero.
Y tal como señalamos la semana pasada cuando comentamos el famoso “Plan México”, Claudia Sheinbaum continúa su guion de anunciar más proyectos e inversiones que servirán para lograr el crecimiento que no hemos tenido en los últimos años, sin explicar el origen o procedencia de tales inversiones salvadoras que como se puede comprobar fácilmente con los mismos datos del Inegi; desde el primer trimestre de 2023 hasta el primer trimestre de 2025 el crecimiento de PIB no ha alcanzado siquiera el uno por ciento, por no hablar del cero crecimiento en el primer trimestre del 2024 o el ya mencionado menos 0.6% del último trimestre de ese mismo año*.
Ahora bien, los pronósticos de los mismos especialistas distan de ser optimistas para los meses venideros, según Alfredo Coutiño, director para América Latina de Moody’s Analytics, “la mejoría del PIB es marginal y aún refleja cierta debilidad, por lo que, aún es prematuro descartar una recesión”. “La mayoría de los efectos adversos de los aranceles se mostrarán en las exportaciones de abril y de los meses siguientes, mientras que el impacto de la deportación de trabajadores mexicanos se sentirá en las remesas durante el año”. Por lo que el pronóstico de esa calificadora incluye una caída económica de 0,3% en 2025, que incluye una contracción trimestral en, al menos, el segundo trimestre.
Por su parte el Fondo Monetario Internacional prevé una caída de 0,3% en el PIB mexicano este año. Asimismo la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) revisó a la baja su estimado de crecimiento para la región, en donde México es el país con menor crecimiento para este año, sólo después de Venezuela.
En el documento Proyecciones Económicas para América Latina y el Caribe, la CEPAL proyectó un crecimiento de apenas 0.3% para México este año, desde el estimado 1.2% que tenía al cierre del año pasado, mientras que el Banco Mundial ve crecimiento nulo para este 2025**.
Como se puede apreciar las estimaciones y proyecciones de los bancos y organismos internacionales contrastan seriamente con el optimismo injustificado de la señora presidenta y su secretario de Hacienda quienes aseguran que el país crecerá entre 1.5 y 2.3% este año.
Por supuesto que no podemos olvidar la bravata al estilo de su antecesor cuando la mandataria para justificar su desacuerdo con los organismos internacionales manifestó: "No conocemos con base en qué lo hacen, no coincidimos", dijo Sheinbaum al ser consultada en su conferencia la "Mañanera del Pueblo" sobre el anuncio del FMI. "Nosotros tenemos modelos económicos que tiene la propia Secretaría de Hacienda que no coinciden en este planteamiento". Tras asegurar que los organismos financieros internacionales "estaban acostumbrados a decir qué se tenía que hacer en cada país", dijo que confía en el éxito del Plan México.
Y efectivamente en eso confía, aunque como ya vimos somos muchos los que no compartimos ese optimismo.
Qué bueno que existan crédulos y optimistas pero como ya señalamos al principio, celebrar un crecimiento de 0.2 % es pasarse de simpático, por no decir otra cosa. Aunque claro siempre será mejor que dolerse por números aún más negativos.
Estamos cual funambulistas siempre en la cuerda floja.
*https://elpais.com/mexico/economia/2025-04-30/mexico-esquiva-la-recesion-tecnica-con-un-crecimiento-economico-de-02-en-el-primer
**https://www.eleconomista.com.mx/economia/cepal-le-pasa-tijera-pib-mexico-preve-expansion-