*Vuelos no turísticos y Golfo industrial
A lo largo de este año se ha comentado, reporteado y documentado sobre el incremento de actividades de inteligencia o espionaje de parte de los Estados Unidos sobre actividades criminales en nuestro país, y desde la toma de posesión de Donald Trump ese asunto ha escalado ya hasta las primeras planas de diarios y noticiarios nacionales e internacionales.
Pese a las declaraciones presidenciales de “cooperación no subordinación”, “coordinación, no sometimiento”, “respeto a las territorios y soberanías” y demás retórica, esta misma semana quedó al descubierto lo que el New York Times publicó sobre “El programa encubierto, iniciado durante la administración Biden e intensificado por el presidente Trump,-que- busca la ubicación de laboratorios de fentanilo”*.
Según el diario, “El programa encubierto de drones, que no había sido revelado previamente, comenzó bajo la administración de Biden. Pero el presidente Trump y su director de la CIA, John Ratcliffe, han prometido reiteradamente acciones más intensas contra los cárteles de la droga mexicanos. El aumento de los vuelos con drones fue un primer paso rápido”.
Pese a que aquí no se nos ha informado al respecto “por ahora, los agentes de la CIA en México pasan la información recogida por los drones a los funcionarios mexicanos”. Conforme a la publicación, dichos drones equipados ex-profeso han sido eficaces para identificar laboratorios de fentanilo, ya que emiten sustancias químicas que facilitan su localización desde el aire.
Dicha información se utilizó para realizar arrestos, aunque aquí se diga que tales operativos para localización, decomisos y destrucción de los mismos y los arrestos habían sido hechos por autoridades mexicanas (Hecho en México), entre Guardia Nacional, Marina, Defensa, policía estatal municipal y demás reporteros, acompañantes y amigos.
Y para que no haya dudas, el Comando Norte de EE.UU. en un comunicado este mes informó sobre “más de dos docenas de vuelos de vigilancia sobre la frontera utilizando una variedad de aviones de vigilancia, incluidos U-2, RC-135 Rivet Joints, P-8 y drones, también ha creado un grupo de trabajo especial de inteligencia de 140 analistas, ubicado cerca de la frontera, para analizar la información recopilada por los vuelos de vigilancia y otras fuentes”.
“Los drones MQ-9 Reaper, que suelen usarse en operaciones militares en Siria, Irak y Somalia, no están armados en esta operación, aunque conservan su capacidad para realizar ataques de precisión si se requiriera”**.
El general Gregory M. Guillot, jefe del Comando Norte, aseguró que la información fue compartida con funcionarios mexicanos para ayudarlos a “abordar la violencia de los cárteles en términos de enviar más tropas”. Lo que en buen español significa que a los 10 mil efectivos que ya se han desplegado en la frontera todavía deberán destacamentar otros miles más.
Recuérdese aquí que Trump ha sido reiterativo sobre la falta de esfuerzo del gobierno de México sobre el fentanilo y otras drogas al igual que la migración.
Cuando se le preguntó sobre los comentarios del general Guillot, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, dijo que la soberanía mexicana “no es negociable y siempre vamos a coordinar sin subordinarnos”.
Todo esto sucede a menos de 48 de la llegada de fuerzas armadas norteamericanas en suelo mexicano para adiestrar fuerzas castrenses locales.
Cabe aclarar que como señalé erróneamente la semana pasada, no es la primera ni la segunda ocasión en que eso sucede, según fuentes cercanas al CFE (Cuerpo de Fuerzas Especiales) “desde hace 10 o 12 años grupos de Fuerzas Especiales norteamericanas han venido al país siempre con permiso de ambas Cámaras”.
Esta semana ya se publicó la declaratoria oficial que designa como grupos terroristas al Cártel de Sinaloa, Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), Cártel del Noreste, Nueva Familia Michoacana y Cárteles Unidos. Ya no son amenazas, ya son hechos concretos “no campañitas”.
Mientras tanto no podemos olvidar que la superficie total del Golfo de México, es de 1,553,287.847 km² (100%), y considerando éstas como aguas internacionales, de las cuales 740,474.984 km² (47.67%) pertenecen a la Zona Económica Exclusiva (ZEE) de México; 695,120.849 km² (44.75%) a la ZEE de los E.U.A., y 81,309.295 km² (5.23%) a la ZEE de Cuba. No hemos reclamado o dicho nada todavía. El problema no sólo es cómo se llama tal superficie.
Adicionalmente, el área de Aguas Internacionales, es decir, la porción que no forma parte de ninguna ZEE nacional, abarca 36,382.719 km² (2.34%)***.
Esa enorme superficie que en algunas regiones supera los tres y medio o cuatro kilómetros de tirante acuático, es donde se encuentran enormes yacimientos de petróleo, gas, otros minerales y “tierras raras” que una vez decretada a nivel constitucional la no perforación por parte de empresas privadas, ¿esperaremos a ver qué decide el vecino? México no tiene dinero para esas inversiones y ya había resuelto eso con Peña Nieto.
Uno de los lemas MAGA (Make America Great Again) consentidos es: “Perfora bebé, perfora” (Drill Baby Drill).
Señalo este detalle porque hace apenas unos días míster Trumpedo reautorizó este viernes 14 la perforación de petróleo y gas en 625 millones de acres de terrenos federales que su antecesor, Joe Biden, había protegido de estas actividades durante su administración, zonas clave, como los océanos Atlántico y Pacífico, el mar de Bering y el Golfo de México. Sin embargo, la nueva administración de Trump ha revertido esta medida.
Así de peligroso y serio son los asuntos: Ya hemos dicho hasta el cansancio que por lo menos durante los próximos 300 días lo que se debe hacer es pensar, negociar, trabajar, corregir, actuar y callar.
Ante este escenario, con estos hechos ya oficiales, no declaraciones ¿en qué beneficia a México seguir fingiendo ignorancia sobre la colusión de autoridades con delincuentes y narcos? ¿en qué beneficia al país seguir protegiendo a personas como Rubén Rocha, Cuauhtémoc Blanco, Cuitláhuac García, Quirino Ordáz, Rutilio Escandón, Claudia Pavlovich, Omar Fayad, Ignacio Ovalle y demás acusados de corrupción y crímenes de diversa índole?
¿En qué abona para las negociaciones conservar esa canalla y mantener todas esas redes de corrupción intactas?
Leyes e instituciones anticorrupción ineficaces, incompletas, inoperantes y sin recursos.
Impunidad e injusticia, sin reparación integral del daño, ni recuperación de los recursos desviados.
Impunidad en casos de corrupción: por cada 100 actos de corrupción, 92 quedan sin castigo.
*https://www.nytimes.com/2025/02/18/us/politics/cia-drone-flights-mexico.html
**https://www.cronica.com.mx/nacional/2025/02/18/cia-espia-carteles-mexicanos-con-drones-bajo-orden-de-trump/
***https://simar.conabio.gob.mx/gomx/#:~:text=La%20superficie%20total%20del%20Golfo,a%20la%20ZEE%