Se intensifica la histórica lucha
La intensa lucha entre los poderes que comandan Andrés Manuel López Obrador en el Ejecutivo, Norma Piña en el Judicial y senadores del PAN, PRI y MC en el legislativo, afilan sus armas para dar la batalla final el próximo miércoles, cuando en el Senado de la República se vote la Reforma Judicial que desató este histórico pleito del que podría salir derrotado el presidente de la República.
Los escenarios en este ring nacional están perfectamente definidos y visibles, lo mismo que las estrategias y movilizaciones que agitan las aguas en las calles de casi todas las entidades del país, los más en contra de la reforma y los menos a favor de la misma.
Pero el presidente López Obrador parece haber lanzado su último golpe con la orden que giró desde su mañanera este viernes a su operadora secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde Luján, en el sentido de que el lunes lleve a ese escaparate información detallada de la riqueza que ostentan los ministros de la Corte y todo lo que pueda generar odios entre el pueblo.
Por su parte, la presidenta de ese poder, Norma Piña, anunció que realiza una consulta a fondo entre lo más selecto del doctorado en materia constitucional, con el propósito de documentar con toda la riqueza jurídica posible y llevarla a la discusión nacional y ofrecer pruebas del daño que puede sufrir la nación en su conjunto si permite esta reforma en sus términos; es decir, como la pretende imponer el Jefe del Poder Ejecutivo.
Pero el golpe de nocaut parece estar listo en la esquina del ring donde se aloja en este momento el documento de la reforma al Poder Judicial, que es el Senado de la República, donde los legisladores de Morena, PT y PVEM suman 85 votos y solo les faltaría uno para que ganen la batalla.
Y todo parece indicar que esto no se lo permitirá ningún senador del PAN, ni del PRI, ni de Movimiento Ciudadano, pues los 43 que integran ese bloque ya adelantaron, pública y abiertamente, que votarán en contra y con ello se acabará el histórico enfrentamiento al mandar al bote de la derrota el contenido de ese proyecto que contiene, entre otras barbaridades, otorgar cargos de juez a través de una tómbola; es decir, convertir a la Corte en feria donde se rifen boletos para aplicar justicia.
Pero nada está definido hasta que ocurra y si no aparece un traidor opositor en el ring que meta el pie a sus compañeros de batalla con su voto a favor de la reforma, la derrota de López Obrador se consolidará.
En cambio, si sale alguien del PRI, del PAN o del MC y anuncia que siempre no, que siempre sí apoya la reforma, entonces el presidente de la República saldrá airoso y festejará a más no poder en las mañaneras que le restan antes de que termine su mandato el último día de este mes de septiembre.
Así están los escenarios y así terminarán el próximo miércoles cuando se ponga a votación el documento en el Senado de la República.
06/09/2024