Para fomentar un mayor uso de la bicicleta en el contexto laboral y como un medio de trasporte alternativo, un grupo de legisladores federales proponen exentar del pago de impuestos la adquisición de bicicletas y motocicletas cuya propulsión sea a través de baterías eléctricas recargables.
Mediante una iniciativa, presentada a la Comisión Permanente, que propone reformar el artículo 9º. de la Ley del Impuesto al Valor Agregado y el artículo 34 Ley del Impuesto Sobre la Renta, los senadores buscan fomentar un mayor uso de la bicicleta entre la población en general y promover los múltiples beneficios físicos, psicológicos y sociales que tiene el uso de la bicicleta y la motocicleta.
A nombre de las senadoras Geovanna Bañuelos, Cora Cecilia Pinedo, Alejandra León y los senadores Miguel Ángel Lucero y Joel Padilla, la senadora Nancy de la Sierra Arámburo señaló que el Estado mexicano debe implementar estímulos que promuevan el uso de la bicicleta no sólo desde la visión de los beneficios a la salud, sino también de los trabajadores que usan este medio de transporte como herramienta de trabajo.
“Deducir el ISR cuando la bicicleta es considerada una herramienta de trabajo para la persona que la utiliza, debe ser la acción principal para poder incentivar de manera económica su uso”, sostuvo.
Por ello, explicó que la propuesta pretende hacer deducible el 100% del monto total de la enajenación para bicicletas convencionales, bicicletas y motocicletas cuya propulsión sea a través de baterías eléctricas recargables.
Con esta medida, dijo De la Sierra, las personas físicas que laboren y utilicen la bicicleta para desarrollar una actividad empresarial también podrán ser beneficiadas con tal estímulo fiscal.
“Dados los importantes beneficios físicos, psicológicos y sociales que tiene el ciclismo. Se deben considerar y plantear los estímulos fiscales necesarios para fomentar el uso de la bicicleta”, mencionó.