El presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que pedirá a la titular de la secretaría del Trabajo investigar las condiciones en que se encuentra el Sindicato Mexicano de Electricistas, SME, porque los trabajadores se quejan de un cacicazgo que su gobierno ya no está dispuesto a permitir.
La pregunta fue: “El día de ayer se habló del Sindicato Mexicano de Electricistas. De hecho, usted afirmó que al SME lo destruyeron. Este año hay cambio de su secretario general, que es Martín Esparza, y se piensa reelegir, lleva 15 años como secretario general y ya antes venía ocupando otras carteras, es decir, prácticamente nunca ha trabajado.
“Encima de eso, modificó los estatutos sindicales para que la duración en el cargo fuera por cinco años en lugar de dos, como estaba establecido desde los años 30 del siglo pasado.
“Simultáneamente a su cargo como secretario general, es miembro del Consejo de la Administración de la empresa trasnacional Fénix, lo que lo convierte en el representante de los trabajadores y de la empresa al mismo tiempo. Es juez y parte, conflicto de intereses y aun así quiere la elección ocupando ambos puestos.
“En junio del año pasado hubo elecciones para cambiar a la mitad del comité y hay una demanda por fraude electoral que no avanza. El elefante reumático no camina; sin embargo, en cuestión de días le dieron toma de nota tanto del proceso electoral como de la reforma de estatutos sindicales. Aquí no hubo elefante reumático; al contrario, un veloz correcaminos.
“Ahora en 2020, que habrá elecciones para elegir al secretario general, puede suceder lo mismo, que les den su reconocimiento y las demandas estén nuevamente congeladas.
“¿Por qué no se agiliza el proceso de la demanda?, ¿por qué se permite que un miembro representante de la empresa Fénix sea también el representante de los trabajadores de esta misma empresa?
“Si es cierto que este gobierno no protege a dirigentes, ¿por qué en cuestión de días le da la toma de nota a la reforma de estatutos sociales y al comité y seis meses no avanza la demanda de estos trabajadores? Esa sería mi primera pregunta, presidente.
Y esta fue la respuesta de López Obrador: “Vamos a pedirle a Luisa María Alcalde y a la licenciada Olga Sánchez Cordero que nos ayuden en este proceso de democratización en el SME.
“Hay, como se sabe, grupos, hay diferencias, pero yo creo que se puede conciliar con todas las tendencias, los grupos que hay, y que se le dé la oportunidad a los trabajadores para que ellos decidan de manera democrática, en forma libre.
“Entonces, le voy a pedir a Jesús para que platique contigo y que se haga la convocatoria a un diálogo a los representantes de todos los grupos, a ver qué se puede lograr. Yo pienso que se puede llegar a acuerdos si hay esta voluntad de que sean los trabajadores los que de manera libre decidan sobre sus representantes”.