Hay casos graves
Los prestamos IMSS o para jubilados son cada vez más solicitados en México. Se trata sin dudas de una ayuda para aquellos que ya no trabajan pero que por ejemplo tienen deudas o necesitan efectivo adicional para algún tipo de reparación en casa o un tratamiento médico especial.
Los jubilados de la IMSS ahora tienen la posibilidad de acceder a créditos que directamente serán descontados de sus haberes o pensiones. Cada mes, el beneficiario puede pagar el préstamo sin tener que hacer ningún trámite.
Además, puede elegir cualquiera de las entidades financieras que han firmado un convenio con la IMSS. Es decir que tiene la posibilidad de analizar los alcances, características, cantidades, intereses y demás datos importantes a la hora de tomar una decisión.
Los prestamos IMSS son más que interesantes por el “simple” hecho de que la cuota se descuenta directamente de la mensualidad que recibe el pensionado. El crédito cuenta con varios y amplios plazos, los cuales serán aceptados según la edad del solicitante y el monto que necesita.
Lo máximo que dura el crédito es 60 meses (5 años).
En cuanto a requisitos, además de ser jubilado o pensionado IMSS, pueden pedir un crédito aquellos que reciban una pensión por invalidez, por retiro o por vida (por riesgo de trabajo).
A su vez los que han sido cesados por edad también pueden acceder a este servicio.
Todos los que han entrado en la ley de seguro social dictada en 1973 pueden solicitar los prestamos IMSS directamente y en el caso de estar dentro de la ley de 1997 es necesario comunicarse con la aseguradora que paga la pensión.
La documentación que se debe presentar para los prestamos IMSS dependerá de la situación particular de cada jubilado o pensionado, así como también del monto y el plazo. En todos los casos tendrán que llevar a la entidad un informe de pago, el cual se puede conseguir en cualquier de los módulos de comprobación de supervivencia.
También es fundamental tener una identificación vigente y oficial: credencial para votar, pasaporte, cédula profesional (de no más de 10 años de antigüedad) o cartilla del servicio militar. Además, el IMSS solicita que el beneficiario presente la impresión de CURP y la documentación adicional requerida por la entidad financiera que realiza el trámite.
Para acceder a estos créditos es fundamental haber cobrado al menos tres meses antes la pensión o jubilación y firmar una autorización donde indica que la entidad que entrega el dinero puede descontar el monto de la cuota cada mes según el valor estipulado en el contrato.
Es fundamental saber que como máximo, a un cliente se le puede descontar el 30% mensual de su jubilación. De esta manera, si por ejemplo recibe $3000, la cuota por mes no puede ser mayor a los $1000. A su vez, el dinero una vez percibido el descuento no podrá ser inferior a la pensión mínima garantizada por la ley vigente.