El presidente Andrés Manuel López Obrador escuchó con interés la pregunta de un periodista chino y mandó decir a una empresa minera de ese país que si la explotación de litio la hace conforme a las reglas mexicanas y la concesión que le otorgaron los gobiernos anteriores está totalmente apegada a la ley, no tiene nada de que preocuparse.
Así fue el diálogo: “Me llamo (inaudible), corresponsal de Nikkei, periódico de Japón.
“Mi primera pregunta es sobre la nueva ley minera y la empresa china Ganfeng. Usted ha mencionado que se revisarán los contratos de la empresa Ganfeng, que produce el litio. En caso de que el contrato actual de Ganfeng muestre legalidad para la explotación de litio, ¿aun así se aplicaría la nueva ley de minería?”.
Y eta fue la respuesta del presidente López Obrador: “La ley del litio para la nacionalización de este mineral que es estratégico, ya pronto se van a dar a conocer los lineamientos generales, la empresa que va a manejar lo de la explotación del litio.
“Desde luego, lo que se aprobó es que el litio es propiedad de la nación, no va a ser manejado por empresas extranjeras ni por empresas nacionales, va a depender de la Secretaría de Energía del gobierno federal, ahí se va a ubicar la nueva empresa del litio.
“En el caso de los convenios que se otorgaron con anterioridad, se van a revisar para ver si fueron solicitados para explotar litio, no minerales en general.
“Si fueron solicitados para explotar litio y están en regla, y hay proyecto de exploración y de producción, se van a respetar. Desde luego, ya no se van a entregar permisos, concesiones para la explotación del litio, todo va a estar dirigido por esta empresa de la nación que se va a crear.
“Puede esta empresa de la nación establecer relaciones con empresas que quieran comprar materia prima, puede establecer relación porque se trata, repito, de un mineral estratégico sin el cual sería muy difícil la transición energética, es un material básico para las pilas, para los autos eléctricos, está muy vinculado a la industria automotriz.
“Entonces, la empresa de la nación puede hacer acuerdos, pero la propiedad del mineral es de los mexicanos”.