Por Efrén Páez Jiménez
(dpl news) Aunque la industria en México es uno de los segmentos más importantes de la economía, panelistas participantes del foro México 5G (MX5G) coincidieron en que actualmente se carece de planeación que le permita hacer la transición hacia la Industria 4.0 que aproveche tecnologías como el 5G e impulse al país a integrarse a las cadenas de valor de América del Norte.
Nanghelly Aurora Silva Anzaldúa, vicepresidenta Nacional de Innovación, Desarrollo de Ciencia y Tecnología de la Canacintra, advirtió que actualmente “no hay una política industrial instrumentada real”; sin embargo, existe la urgencia de alimentar las fortalezas de hoy, al tiempo que se planean los proyectos a futuro.
La directiva puso el ejemplo de Alemania, donde se utilizó por primera vez el concepto de Industria 4.0, como un país que planea con prospectiva de futuro, y acompaña esta planeación con construcción de infraestructura y el desarrollo de los recursos humanos.
Lamentó que “en México la planeación es de corto plazo”, que cambia según cada administración y con diferente visión que retrasa lo que se había logrado anteriormente.
“La planificación es lo que nos hace falta en América Latina, y los procesos industriales y educativos, que los políticos entiendan” sobre la necesidad de planificar a 10 años, señaló Marina Rosso Siverino, vicepresidenta del Departamento Técnico del Centro Argentino de Ingenieros.
Por su parte, Clelia Hernández Orta, directora General de la Iniciativa Nuevo León 4.0, coincidió en que la adopción de conceptos como Industria 4.0 o tecnologías como 5G se deben integrar desde la política pública del Estado.
“Tiene que estar en la agenda nacional y tenemos la corresponsabilidad de solicitarlo como un ecosistema articulado, y el gobierno necesita escuchar más a expertos y agentes”, agregó.
Silva consideró que la iniciativa privada también requiere trabajar de una forma más coordinada, contrario a lo que sucede hoy con esfuerzos aislados y la duplicación de recursos. “Qué pasa si nos ponemos en una misma página, que aunque no venga desde la administración pública, pero desde la iniciativa privada, optimicemos nuestras inversiones, y que influya en la política pública”, dijo durante su participación.
Azul Ogazón Gómez, directora de Industrial Transformation México de Hannover Fairs, consideró que aunque existe una necesidad de política pública para impulsar la integración de tecnología en las industrias, aún existen avances a nivel local que apuestan a la transformación digital en estados como Guanajuato, Jalisco o Aguascalientes.
“5G es la arquitectura que nos dará el potencial para que la industria 4.0 se vuelva realidad, tenemos ese deseo de fábricas inteligentes, supervisadas remotamente, más seguras para el personal y que genere mayor productividad, pero que represente el desarrollo social del país”, agregó.
Si bien se requiere de una política nacional que impulse la digitalización de la industria, también se debe evaluar caso por caso, según la necesidad de conectividad de cada industria y sector, indicó por su parte Rodrigo Zavala, director de Automatización de Procesos y Sistemas de Comunicación Industriales de Siemens México, Centroamérica y el Caribe.
Reconoció también que existen avances en el país donde ya se utiliza 4G o la geolocalización en plantas industriales, a la vez que ciertas empresas han adoptado las mejores prácticas al formar parte de su integración a corporativos mundiales.
Rosso señaló también que existen otros retos en el ecosistema, como planificar el aprovechamiento de los nuevos recursos tecnológicos, desarrollar talento para el impulso a soluciones de Inteligencia Artificial y 5G, atender las labores desplazadas por la robotización, además de un despliegue rápido de 5G con una amplia cobertura.
Espectro para mejor conectividad
Los panelistas también destacaron la importancia de contar con el espectro suficiente y adecuado para el lanzamiento de tecnologías como 5G que soporten la digitalización de las industrias.
Al respecto, Raúl Lucido, consultor Senior en Mercados de TI y de Telecomunicaciones Internacionales, alertó que el costo actual de las frecuencias en México es un “inhibidor”, y representa un riesgo que podría retrasar o limitar el lanzamiento de 5G en el país.
En ese sentido, reiteró que la integración de México a las cadenas de valor de América del Norte dependerá del acceso a las frecuencias de una forma adecuada, que no descapitalice a los operadores o que se utilice ese dinero recaudado en conectividad social.
Por su parte, Héctor Marín, director Sénior de Relaciones con Gobierno para América Latina de Qualcomm, dijo que también se debe cuestionar para qué se realiza el despliegue de 5G. Al considerar que actividades cotidianas como enviar un mensaje por WhatsApp o descargar contenido no requieren de la nueva red, alrededor del mundo el despliegue de 5G se concentra en servicios para las industrias o en Acceso fijo-inalámbrico (FWA).
En ese sentido, indicó que los primeros lanzamientos de 5G se deben aprovechar para impulsar la industria 4.0 como la minería o la automotriz, que requieren de un área de cobertura relativamente pequeña y pueden explotar el ancho de banda que ofrecen nuevas frecuencias como el segmento de las bandas milimétricas.
Explicó también que el 5G puede tener un impacto positivo en la conectividad social, ya que incluso puede ofrecer un beneficio colateral para los que no lo usen, como lo es la liberación de las redes actuales de 3G y 4G que ofrecen un mejor servicio para los usuarios que no hagan la transición a la nueva generación.