El presidente Andrés Manuel López Obrador no se anduvo por las ramas y para dar ejemplo de que está decidido a dejar un país totalmente limpio de corrupción, dijo que arriba ya no hay este problema, aunque reconoció que abajo sí lo hay, y exigió que si su hermano es responsable, que sea castigado.
Aquí sus palabras textuales pronunciadas este jueves en su mañanera:
“Lo de mi hermano ha quedado ya muy claro de manifiesto que yo no protejo a nadie. Yo llegué aquí para encabezar una transformación, hacerla con todo el pueblo, por eso me dieron su confianza millones de mexicanos y no los voy a traicionar.
“Si mi hermano es responsable, que sea castigado. Yo no establezco relaciones de complicidad con nadie, ni con los miembros de mi familia, yo ya no me pertenezco.
“Entonces, ofrezco disculpa si denuncio actos de corrupción, porque estoy convencido de que ese es el principal problema de México.
“Y puedo, miren sacar mi pañuelito. Ya los jóvenes no usan pañuelo, ni usan peine, ni camiseta ni nada ya, pero puedo decir que no se permite la corrupción.
“Todavía hay abajo, porque se está limpiando de arriba para abajo como se barren las escaleras, pero arriba no hay y vamos a seguir limpiando de corrupción el gobierno”.