Mucho se ha hablado de los beneficios de consumir miel de abeja, pero lo que probablemente no sabes aún es que no es apta para todas las personas. Hoy te contaremos más sobre por qué no es bueno darles miel de abeja a los niños.
Tiempo atrás se fomentó la idea de dar pequeñas probaditas de miel de abeja a los niños para incitarlos a consumir leche. Sin embargo, esto no es favorable para los pequeños menores de un año, porque de acuerdo con una investigación de 1976, puede desencadenar botulismo infantil, enfermedad que puede ser muy peligrosa.
Según la Asociación Americana de Pediatría y el Instituto Nacional de Salud en EEUU, se recomienda no darles miel de abeja, debido a que la bacteria que la provoca (Clostridium botulinum) viaja al intestino del bebé y produce la toxina botulinum, que paraliza sus músculos.
Esto causa debilidad y pérdida de tono muscular porque bloquea la capacidad de las terminaciones nerviosas de mandar señales al músculo conectado para que se contraiga, dice el Programa de Tratamiento y Prevención del botulismo infantil.
Con frecuencia esta enfermedad comienza con estreñimiento, pero usualmente se nota primero cuando el bebé muestra dificultad para comer, específicamente al succionar o tragar comida, un llanto débil o diferente, y una expresión facial disminuida.
Es difícil diagnosticar este padecimiento, ya que muchas veces se confunden los síntomas como párpados caídos, constipación y dificultad para succionar y masticar con otros malestares.
A pesar de que los niños de un año de edad pueden consumir miel a la perfección, los especialistas sugieren esperar hasta que cumplan al menos tres años, por las altas concentraciones de azúcares, también puede ser un riesgo en la aparición de caries o un factor que incite a la obesidad.
Fuente: Revista Industrial del Campo 2000 Agro