En un Estado de derecho, se cumple con la Constitución y las leyes; se tutelan los derechos humanos; se consolida la democracia y se procura el constante mejoramiento económico, social y cultural del pueblo, afirmó el Ministro Luis María Aguilar Morales, Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
En la ceremonia en la cual la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) le otorgó la Presea “Culturae Legis”, el Ministro Presidente aseveró que en un Estado de derecho se vive en paz; se combate la corrupción; se vive sin discriminación; se erradica la violencia en contra de la mujer; se garantiza el interés superior de la niñez; se defiende la soberanía nacional; se protege al inocente y el culpable no queda impune; en un Estado de derecho, florece y se desarrolla la cultura de la legalidad.
“Y por supuesto, en todo Estado de derecho hay un Poder Judicial fuerte e independiente, atento siempre a que todo el que se queje con justicia tenga un tribunal que lo escuche, lo ampare y lo defienda contra el fuerte y el arbitrario”, dijo ante Dionisio Meade y García de León, presidente de la Fundación UNAM, Leonardo Lomelí Vanegas, secretario General de la UNAM, Raúl Contreras Bustamante Julián Güitrón Fuentevilla, director y profesor de la Facultad de Derecho de la UNAM, respectivamente.
En el Palacio de la Autonomía expresó su gratitud a Enrique Graue Wiechers, rector de la UNAM, y al Consejo Técnico de la Facultad de Derecho de la UNAM, por haber discernido en su favor el otorgamiento de la Presea “Culturae Legis”; que se entrega por vez primera y que recibe con gran orgullo.
Puntualizó que como egresado de la Facultad de Derecho de la UNAM, siempre se sentirá orgulloso de formar parte del que es, sin duda, el proyecto cultural más importante de este país “nuestra Máxima Casa de Estudios, la UNAM, que ha sido forjada y defendida como un espacio de libertades, por miles de universitarias y universitarios, a lo largo de varios siglos”.
Ha sido también un gran honor para mí, agregó, “el haber hecho de la Facultad de Derecho, en mis épocas de estudiante, mi segundo hogar; y siento un profundo arraigo con mi alma mater, que hoy día, continúa formando juristas e investigadores, para ejercer el liderazgo científico con justicia, equidad, solidaridad, ética social y sentido propositivo de soluciones a los problemas jurídicos de la sociedad contemporánea.
A la vez que impulsa la investigación inter, multi y transdisciplinaria; promoviendo la cultura de la legalidad, la innovación y la difusión jurídicas, en beneficio directo del Estado de Derecho, ejerciendo la transparencia por medio del diseño, uso y apropiación de tecnologías de la información y de las comunicaciones en general, acrecentando el liderazgo de los juristas e investigadores egresados de la Facultad de Derecho a nivel nacional e internacional”.
El Ministro Presidente Luis María Aguilar Morales reflexionó sobre la cultura de la legalidad, teniendo como premisa que esa cultura es, a su vez, uno de los magnos pilares del Estado de derecho. Citando a Roy Godson, en su Guía para desarrollar una cultura de la legalidad, señala que éste afirmó que cultura de la legalidad significa que la cultura, ethos y pensamientos dominantes en una sociedad, simpatizan con la observancia de la ley.
Apuntó que Rodolfo Vázquez ha señalado que “la cultura de la legalidad es la aceptación voluntaria, por parte de los actores jurídicos y de la ciudadanía, de un conjunto de normas jurídicas generales, públicas y no retroactivas, que se consideran correctas para una adecuada convivencia social”.
Por ello, la cultura de la legalidad, desde luego, nos obliga a interiorizar, como punto de partida, muchas ideas fundamentales contenidas en nuestra Carta Magna. “Así, nuestra ley fundamental pone los cimientos de la cultura de la legalidad, al disponer, por ejemplo: que ninguna persona podrá hacerse justicia por sí misma, ni ejercer violencia para reclamar su derecho; y que toda persona tiene derecho a que se le administre justicia por tribunales que estarán expeditos para impartirla en los plazos y términos que fijen las leyes, emitiendo sus resoluciones de manera pronta, completa e imparcial”.
Destacó que como afirma Tom Bingham, en su reciente obra en español El Estado de Derecho, traducida por el Ministro Eduardo Medina Mora, el Estado de derecho exige al Estado el cumplimiento de sus obligaciones tanto en el derecho nacional como en el derecho internacional.