*México necesita reencontrarse a pesar de sus diferencias
Quiero proponer que hagamos un ejercicio de reencontrarnos, reconozco que en este Senado habemos personas de distinta manera de pensar, pero que todos queremos lo mejor para nuestro país, en eso estoy convencido y apeló a ese espíritu para reconocernos y reencontrarnos, reconocer que hay luchadores sociales auténticos que quieren cambiar este país, reconocer que el primero de julio fue un mensaje muy poderoso de la gente que está insatisfecha y que quiere un mejor México.
Quiero expresar desde hoy mi honesto y sincero ofrecimiento de colaborar con todo para la próxima administración, en todo lo que beneficie a los mexicanos y pedirles también el apoyo para disentir y para expresar formas distintas de entender.
Podemos verlo en los periódicos, hay gente que hoy mismo piensa diferente a la decisión del presidente electo y eso es respetable, y lo que tenemos que encontrar son salidas, salidas democráticas; respetamos a quienes defienden Santa Lucía como la mejor decisión, respeten también a quienes pensemos distinto.
Quiero enmarcar también esta reflexión, en una reflexión más amplia, más contemporánea, más preocupante, que rebasa el mismo aeropuerto y que es una enfermedad del presente, la democracia siempre ineludiblemente implica la pluralidad, nunca extinguir a la oposición o fustigar la crítica como nos ha pasado.
El siglo pasado fue un siglo doloroso para la humanidad, dos proyectos que se ofrecieron como solución fracasaron, el fascismo en 1945 y el régimen comunista en 1989, pero lo que hoy tenemos como superviviente en el Siglo XXI es la democracia, pero la democracia misma no está dando los resultados que la gente necesita, la mayoría de la población, la democracia liberal, y por eso nos exigen formas nuevas de participación y aquí está la democracia directa, la necesidad de darle canales anchos de participación a la gente para que se exprese y en ese sentido, bienvenidas las consultas.
Quiero decir que este no es un planteamiento nuevo para Acción Nacional, desde hace más de 25 años nosotros ya hemos legislado y aprobado, pongo como ejemplo Chihuahua con Francisco Barrio, se aprobó la consulta popular y la iniciativa ciudadana, desde entonces la tenemos y la apoyamos, no nos confrontemos, no es consulta sí o consulta no, creemos, queremos la consulta, dotémosla de los candados democráticos para que a todos nos dé certidumbre, y yo estoy convencido de que aquí estoy tocando, en muchos de mis compañeros senadores de Morena y senadoras también, una preocupación que compartimos: si ésta debe ser, como lo es, una nueva forma que abramos a la participación directa a los ciudadanos, cómo hacerlo de la mejor manera, para que tomemos las mejores decisiones y ahí es el reto que quiero invitarlos a todas y a todos ustedes.
Creo que podemos encontrar salidas, la consulta que se hizo es…, algunos dicen legal o ilegal, otros dicen es “alegal”, no contradice ninguna disposición, pero tampoco responde a lo que establece el artículo 35 de la Constitución, en este sentido hay que hacer una reforma para garantizar que en el futuro estas consultas cumplan con estos mínimos de imparcialidad, de representatividad, de transparencia y de que también sean sobre temas previos e informados, no simulaciones, no maniqueísmos, no opacas, no sin metodología y no sin padrones, ésta es la necesidad que tenemos en México de encontrar una construcción de futuro, las democracias hoy democráticamente están eligiendo a Donald Trump, las democracias hoy democráticamente están eligiendo a Bolsonaro, aguas, necesitamos abrir el cauce de la participación directa de la gente de la mejor manera, para que en México salga lo mejor de nosotros mismos y tomamos las mejores decisiones.
Yo propongo simplemente dos cosas: que legislemos sobre la materia garantizando estos candados, incluso que metamos a consulta temas tan cruciales como la reforma educativa, pero que lo hagamos de una manera informada, previa, que tomemos los temas torales del país y hagamos este ejercicio democrático.
El otro tema que quiero dejar sobre la mesa es que habrá 30 días de un “impasse”: el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, anunció una decisión, el presidente en funciones anunció una definición, hay 30 días de un “impasse”, aprovechemos estos 30 días para encontrar alternativas, porque hay preocupaciones sobre un proyecto avanzado que implica muchos recursos, no sólo pagar y liquidar a la gente, sino la remediación del sitio, sacar esos pilotes, esas estructuras es tan costoso que nadie las ha dimensionado, el impacto de Santa Lucía, el traslado, analicemos todo esto y veamos salidas conjuntamente.
Si la preocupación es la corrupción, que la compartimos, no hagamos maniqueísmos, quienes defendemos Texcoco defendemos la corrupción, no es así, algunos creemos que aeronáuticamente es mejor solución Texcoco, pero hay que combatir la corrupción, en caso de que se presente, ir hasta las últimas consecuencias y me preocuparía que con las liquidaciones que se hagan a los contratistas, también se le esté absolviendo de toda responsabilidad.
Por eso mi propuesta es a reencontrarnos, a abrir estos cauces de participación directa porque la gente lo necesita y a construir una salida de futuro para este país, que nos la reclama, y está en todos nosotros el encontrarla, no es con descalificaciones, no es con confrontaciones, no habemos buenos y malos, todos queremos lo mejor para el país, tenemos distintos puntos de vista.