*Erradicar violencia comunitaria para garantizar desarrollo de mujeres
La importancia de erradicar la violencia comunitaria radica en garantizar a las mujeres el acceso a una vida libre de violencia, el libre tránsito, el respeto a su integridad y el desarrollo pleno en todas las esferas de su vida cotidiana.
No basta con establecer sanciones para erradicar la violencia, sino que es necesario un cambio de paradigma radical, en el que se elimine la noción patriarcal de la superioridad de los hombres sobre las mujeres.
Un paradigma en el que las mujeres no sean vistas como sus propiedades, ni como un instrumento o una servidumbre. Una sociedad en la que todas las personas tengamos, en efecto, los mismos derechos. Una sociedad justa en la que ser mujer sea sinónimo de poder y de libertad.
La Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia señala que violencia en la comunidad son los actos individuales o colectivos que transgreden derechos fundamentales de las mujeres y propician su denigración, discriminación, marginación o exclusión en el ámbito público.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, de las mujeres de más de 15 años en México, 45.6 por ciento, es decir, 23 millones de mexicanas, manifestaron haber experimentado violencia en el ámbito comunitario a lo largo de su vida.
Además, las mujeres son quienes sienten mayor temor de salir y ser violentadas en espacios públicos, así como quienes más sufren el impacto de la inseguridad.
Este tipo de violencia se debe al sistema de valores que privilegia la figura del hombre, al considerarle, por naturaleza, superior, por lo que las mujeres deben soportar todo tipo de violencia, como el hostigamiento sexual callejero, así como actitudes de discriminación.