Durante casi todas las mañaneras del sexenio del expresidente Andrés Manuel López Obrador, fue muy insistente la forma en que se presumían las multimillonarias cantidades de dólares que llegaban a México, procedente de los Estados Unidos…
Además, con júbilo constante el ahora exiliado social peje lagarto llamaba héroes y heroínas a los mexicanos y mexicanas que se encuentran trabajando en el vecino del norte, por las crecientes carretadas de remesas que enviaban a sus familiares…
Este escenario lo festejaba una y otra vez el exmandatario tabasqueño, porque representaba una “fuente” de elemental importancia para el sostenimiento que, a muchos compatriotas, les permitía mejorar las condiciones de manutención que no puede satisfacer el gobierno mexicano…
Esto viene a cuento, porque las versiones que captan nuestros sabuesos informativos por los pasillos de Palacio Nacional, confirman la preocupación de la presidenta con “a” Claudia Sheinbaum Pardo, por los informes que recibe en torno a la caída de remesas y crecientes deportaciones de mexicanos…
Lo anterior, sumado a que la invasión de migrantes centroamericanos por casi todos los sectores de la Ciudad de México y principales ciudades del país, podría alcanzar niveles incontrolables con problemas de consecuencias dramáticas, como desempleo y generación de guetos…
Están a tiempo, señores y señoras de la imaginaria cuarta transformación…
Que quede para la reflexión…