Ya comenzó un cambio verdadero que consiste básicamente en no permitir la corrupción, acabar con la corrupción y que podamos de esa manera ahorrar, que todo lo que se fugaba, se iba por el caño de la corrupción se utilice para el desarrollo y para el bienestar de nuestro pueblo, dijo el presidente Andrés Manuel López Obrador durante su gira de trabajo por San Luis Potosí.
Y añadió: “Ese es el plan en esencia que se está llevando a la práctica. Y vamos avanzando. Sí funciona la fórmula que se está aplicando: que no haya corrupción y que no haya lujos en el gobierno, y que podamos ahorrar, que no le cueste tanto, tanto, al pueblo mantener al gobierno, que no sea un gobierno mantenido y bueno para nada.
“Todo esto es lo que se está convirtiendo en realidad. Me llevaría tiempo aquí explicarles que estamos ahorrando porque ya no se permiten los negocios que se hacían al amparo del poder público, todas las transas que se llevaban a cabo, sobre todo arriba. Siempre nos decían que el problema era la mordida abajo. No, el problema son las tarascadas, no las mordidas; y las transas más grandes son las que se hacían desde arriba. Entre más elevada la autoridad, más corrupción. Ese era el problema.
“Nada de que el presidente no sabía, no se enteraba, lo engañaban. Eso es falso, el presidente de México está informado de todo lo que sucede. Las transas grandes que se llevaban a cabo y que se pudiesen realizar si nosotros no cumpliéramos con nuestro compromiso de gobernar con honestidad, todas esas transas llevan el visto bueno del presidente; aunque no firme él autoriza, él tolera, él permite.
“Por eso tenemos mucha confianza de que las cosas van a mejorar; porque si arriba no se permite la corrupción, vamos a poder limpiar de corrupción al país de arriba para abajo, como se barren las escaleras”.