Se desata la bronca
Antes de que se vaya por la borda la esperanza de todo un pueblo y de que continúen minando la confianza de millones de mexicanos, es mejor que los provisionales se hagan a un lado de la dirección de Morena y que Alfonso Ramírez Cuéllar renuncie, afirmó Alejandro Rojas Díaz-Durán.
El político morenista consideró que la Nomenclatura tiene todo el derecho de seguir impulsando sus autoritarias y antidemocráticas ideas, pero como minoría que es dentro del movimiento y en México, no tiene derecho de seguir dañando la Cuarta Transformación y al gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Sus tesis de una izquierda radical que se quedó anclada en el siglo XIX, no representan a la amplia mayoría de lopezobradoristas que constituimos una izquierda democrática, progresista y moderna, que vemos con esperanza la construcción de un nuevo futuro para la Nación”.
El aspirante a la presidencia de Morena aseguró que no permitirá que esas ideas inconstitucionales y violatorias de las garantías individuales, de los derechos y libertades fundamentales de todos los mexicanos, se inserten en el Proyecto de Nación forjado durante décadas y con el cual se ganó el poder político.
Si la Nomenclatura hubiera promovido sus propuestas en la campaña de López Obrador, no se hubiera ganado la Presidencia de la República.
Por ello, subrayó, seguirá la exigencia de que la elección para la renovación de las dirigencias de Morena, la organice el INE, a través de la aplicación de tres encuestas abiertas al pueblo de México, para que la gente decida quiénes deben ser los futuros dirigentes del movimiento.
Rojas Díaz-Durán dijo que la Nomenclatura está fraguando otra elección fraudulenta, como la del 2019, “que terminamos tirando en el Tribunal Electoral por la violación flagrante de los derechos políticos, partidistas y humanos de millones de lopezobradoristas.”
Enfatizó que competirá por la Presidencia Nacional de Morena para ganar, desde abajo y con la gente, construir la unidad democrática en la pluralidad política del movimiento, incluida la minoría radical, porque su movimiento sí es demócrata.