Proponen morenistas
El senador Óscar Eduardo Ramírez Aguilar insistió en generar alternativas para reducir el impacto de la pandemia en los trabajadores y garantizarles un ingreso para cubrir sus necesidades básicas, en caso de que hayan perdido su empleo durante la contingencia sanitaria.
El senador por Morena, quien también es presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales, formalizó su iniciativa ante la Comisión Permanente para establecer un Seguro de Desempleo quincenal, de dos salarios mínimos diarios vigentes y por un periodo máximo de seis meses, a quienes sean despedidos por razones ajenas a su voluntad.
Ramírez Aguilar propuso enfocarse en los trabajadores que hayan cotizado, al menos dos años, en el Instituto Mexicano del Seguro Social, cuya baja se realice durante declaratoria de contingencia sanitaria que se emita de acuerdo a la legislación aplicable.
Consideró que esta prestación no debe afectar las indemnizaciones y demás derechos que por ley le corresponden al empleado. Aclaró que en ningún caso se otorgará a los trabajadores despedidos por causas atribuidas a él o cuando se encuentren en litigio laboral.
El legislador planteó que los patrones y trabajadores que presenten datos falsos al IMSS, con el propósito de que el trabajador goce del seguro por desempleo, sean sancionados por fraude genérico.
Sugirió que la Federación, con la aprobación de la Cámara de Diputados, sea quien aporte los recursos para poner en marcha esta prestación. Además, añadió, el IMSS deberá publicar en su portal de internet el número de beneficiarios y el monto ejercido y aprobado.
El senador argumentó que con la crisis sanitaria y económica provocada por la pandemia de Covid-19, el problema del desempleo se ha colocado como una de las mayores preocupaciones de nuestro país.
La iniciativa -que se analizará en las comisiones de Desarrollo Social y de Estudios Legislativos, Segunda- se enfoca al seguro de desempleo desde perspectiva de transición en una contingencia sanitaria, donde la inactividad disminuye la capacidad de compra de las personas y la insuficiencia de ingresos de las empresas para mantener sus actividades.
De esta manera, advirtió Ramírez Aguilar, se entra en un círculo perverso donde hay cierre de empresas, mayores desempleados y caída de la economía.