¿Prosperará?
La senadora panista Xóchitl Gálvez Ruiz presentó denuncias ante la Fiscalía Especializada en materia de Delitos Electorales (Fisel) y la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) en contra de ocho personas, incluida la profesora Delfina Gómez, por retener recursos de salarios de trabajadores del ayuntamiento de Texcoco para fines electorales.
Las denuncias fueron firmadas también por las senadoras Lilly Téllez García, Kenia López Rabadán, Gloria Núñez Sánchez, Nadia Navarro Acevedo, María Guadalupe Saldaña Cisneros y Minerva Hernández Ramos.
Gálvez Ruiz recordó que entre 2013 y 2015, la ahora secretaria de Educación Pública, su hermano Alejandro Gómez y los señores Horacio Duarte y Alberto Martínez, entre otros, implementaron un sistema de retención de recursos provenientes del salario de trabajadores del ayuntamiento y del Sistema Municipal DIF Texcoco, para fines electorales vinculados con la candidatura de la profesora y a Morena, por un monto de 13 millones 8 mil pesos.
“La Fiscalía deberá investigar para castigar a los responsables, trátese de quien se trate, no importa el partido político. Basta de impunidad. La secretaria debe separarse del cargo, debe renunciar”, aseguró la senadora Gálvez.
Precisó que el artículo 11 de la Ley General en materia de Delitos Electorales, en su fracción V, establece que se impondrán de 200 a 400 días de multa y de dos a nueve años de prisión al servidor público que solicite a sus subordinados, por cualquier medio, aportaciones de dinero o en especie para apoyar a un precandidato, candidato o partido político.
La senadora panista añadió que la titular de la SEP contravino también el Código Penal Estado de México, que en su artículo 339 establece que comete el delito de abuso de autoridad contra subalterno, el servidor público que haciendo uso de su empleo, cargo o comisión, obtenga, exija o solicite sin derecho alguno o causa legítima, para sí o para cualquier otra persona, parte del sueldo o remuneración.
Gálvez Ruiz aseguró que el presidente Andrés Manuel López Obrador no sólo debe actuar en contra de sus opositores, sino en contra de los integrantes de su partido y de su gabinete: “parece que el combate a la corrupción queda solo en el discurso”.