Las leyes secundarias en materia educativa señalan con claridad los ámbitos de competencia del gobierno y los sindicatos. “El Estado es el rector en la educación y asume el control del sistema en general y de las plazas en particular, en todo momento”, aseguró el secretario de Educación Pública (SEP), Esteban Moctezuma Barragán.
En su intervención inicial con motivo de su comparecencia para la Glosa del Primer Informe de Gobierno ante el Pleno de la Cámara de Diputados, indicó que el Ejecutivo federal ha sido muy claro al “ordenarnos eliminar la venta de plazas y el abuso en su asignación. Así eliminaremos la corrupción. Vamos a terminar con el huachicol educativo. Ni corrupción arriba, ni abajo. Los beneficiarios sin duda serán los niños y los maestros”.
Dijo que se diseñó un proceso abierto y transparente para garantizar factores, imparcialidad y legalidad en las asignaciones de las vacantes. Además, la posición asumida por el presidente de la República es la de resarcir una deuda histórica con el normalismo, que prácticamente se ha desmantelado.
Moctezuma Barragán expresó que las leyes secundarias disponen de dos elementos indispensables: la planeación estratégica de un nuevo modelo de admisión a las normales, a la Universidad Pedagógica Nacional y a los Centros de Actualización del Magisterio, y una Estrategia Nacional de Fortalecimiento de las Escuelas Normales, que será presentada en noviembre.
El presidente López Obrador y la SEP, añadió, han emprendido una política de diálogo, de puertas abiertas, para resolver los problemas educativos de México, “enfocándonos a lo más importante para nosotros: el aprendizaje de niñas, niños, adolescentes y jóvenes. La política de diálogo no ha privilegiado a nadie”, aclaró.
Resaltó que con la aprobación de las reformas constitucionales en materia educativa y las leyes secundarias, quedaron sentadas las bases del Acuerdo Educativo Nacional. “La Nueva Escuela Mexicana abre un camino de esperanza para hacer resurgir el sistema educativo nacional”.
Ésta, abundó, garantizará una enseñanza sustentada en dos pilares: excelencia y equidad. También asegurará el derecho de toda persona para acceder a la educación, desde el nivel inicial hasta el superior.
Argumentó que un objetivo primordial de la Nueva Escuela Mexicana es reorientar el Sistema Educativo Nacional a fin de impulsar el aprendizaje de niñas y niños. Por ello, “la escuela hoy informa y forma a las y a los mexicanos con base en valores. No fue una decisión, sino una necesidad”.
Con las nuevas leyes, precisó, se da un cambio de paradigma. “Tendremos una evaluación diagnóstica, formativa e integral que permitirá el desarrollo profesional del magisterio, no una evaluación punitiva que los intimide. Un gran avance es que no sólo se evaluará a maestras y maestros, sino a todo el Sistema Educativo Nacional. Esto se llevará a cabo bajo una visión integral, continua, colectiva, incluyente, diagnóstica y comunitaria”.
El titular de la SEP resaltó que se busca impulsar una instrucción humanista para desarrollar en los educandos el pensamiento crítico, la observación, el análisis, la reflexión, las habilidades creativas y la expresión de sus sentidos.
Llamó a celebrar la recuperación del civismo en los planes de estudio, y destacó el énfasis que se hace para la historia, geografía, música, educación sexual, medio ambiente y cultura de paz. También se plantea un aprendizaje que fomente estilos de vida saludables, alimentación sana, la práctica del deporte y la educación física.