El martes pasado la titular del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, Marcela Figueroa Franco, presentó en la mañanera del pueblo extenso informe de los niveles de seguridad e inseguridad que padecen los habitantes de las 32 entidades de la República…
Pero lea usted, avispado y mucha pieza lector, los siguientes párrafos con que el segundo piso de la cuarta transformación, como pomposamente se hace llamar el actual gobierno de la presidenta con “a” Claudia Sheinbaum Pardo…
“Como se ve en la gráfica, en octubre de 2024, se registraron un promedio de 635.9 delitos de alto impacto por día. A partir de esta fecha, se observa una tendencia también a la baja mes con mes, teniendo, en marzo de 2025, un promedio de 538.2 delitos de alto impacto diarios. Esta variación representa una reducción del 15.4 por ciento, equivalente a 98 delitos menos diarios en comparación con octubre…
“En el análisis anual también se observa una tendencia sostenida a la baja en el promedio diario de víctimas de delitos de alto impacto. Entre enero de 2018 y marzo de 2025, el indicador pasó de 969.4 delitos diarios a 567.3, lo que representa una reducción acumulada de 41.5 por ciento en este periodo”…
Nótese que la funcionaria en todo momento insistió en que exhibía estadísticas que solo reseñan los delitos de alto impacto, pero nada dijo de los hechos de bajo impacto, como consideran a los que sufren las mujeres a quienes sujetos que circulan en motocicletas les arrebatan con lujo de violencia sus bolsos y celulares; tampoco se refirió a las extorsiones como el cobro de piso, el robo de automóviles y hasta de bicicletas, entre otros que no se denuncian por las deficiencias con que operan las agencias del Ministerio Público…
Eso fue lo que presumió doña Marcela y así las cosas, reflexione usted, grilloso lector, si se sumaran todos los delitos que ocurren diariamente en todo el país, sin clasificaciones, se entenderá mejor el hartazgo que se está sembrando en este segundo piso al que se llevan a la nación…