La senadora Kenia López Rabadán señaló que “en México vivimos dos pandemias, la ocasionada por el Covid-19 y la causada por la violencia, especialmente la que se ejerce en contra de las mujeres”.
Además, destacó que en esta administración se ha desestimado la violencia en contra de las mujeres, generando una nueva deuda histórica.
“En dos años de gobierno de López Obrador, los resultados para proteger a las mujeres son una vergüenza. Este gobierno no ha dado resultados”, aseguró.
Tal como se desprende de la “Información sobre violencia contra las mujeres”, publicado el 25 de noviembre de este año por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, comparando los meses de enero a octubre de 2019 con el mismo periodo de 2020, las víctimas de homicidio doloso han aumentado en un 3 por ciento y las de trata de personas un 12.3 por ciento, indicó.
Mientras que las denuncias por violencia familiar incrementaron un 3.4 por ciento y por violencia de género un 26 por ciento. Asimismo, las llamadas de emergencia al 911 para reportar incidentes de violencia contra la mujer aumentaron un 40 por ciento y las de acoso u hostigamiento sexual un 12 por ciento, añadió López Rabadán.
La senadora panista manifestó que “la falta de compromiso de este gobierno para erradicar la violencia en contra de las mujeres y niñas ha quedado de manifiesto en cada una de las declaraciones que emite el titular del Ejecutivo federal, ya que no sólo desestima los datos oficiales, tampoco es capaz de reconocer que en nuestro país existen los feminicidios y nos asesinan por el hecho de ser mujeres”.
Por su parte, la Doctora Patricia Olamendi Torres de la organización “Nosotras Tenemos Otros Datos” afirmó que, en México son asesinadas 11 mujeres al día, una de ellas en el Estado de México. Nuestro país se ha convertido en tierra de feminicidios e impunidad y donde las mujeres, niñas y adolescentes no logran acceder a la justicia por un sistema corrupto y patriarcal.
“Es inaudito que en nuestro país la violencia en contra de las mujeres también la ejerza el Estado al criminalizar la protesta y perseguir al movimiento feminista. En días pasados, diversos colectivos que demandaban justicia por el aumento de muertes violentas han sido reprimidos por cuerpos policiales, atentando contra la vida e integridad de las manifestantes al utilizar armas de fuego contra ellas, no se le puede olvidar al gobierno que protestar es un derecho y su represión es un delito”, destacó Olamendi Torres.
La defensora de derechos humanos agregó que “en México los agresores de las mujeres quedan impunes ante la indiferencia de las autoridades, ya que falta perspectiva de género en las instituciones. Desde el gobierno se reproducen los estereotipos de discriminación y violencia en contra de las mujeres y niñas, rigiéndose sistemáticamente por una cultura patriarcal.
Las cifras son desgarradoras, 7 de cada 10 mujeres viven violencia, 4 de cada 10 violencia sexual y 5 de cada 10 son golpeadas, sin embargo, desde la Presidencia de la República se invisibiliza la situación de las mujeres”.
Para concluir, señalaron que “la emergencia sanitaria no sólo puso al descubierto la violencia que se vive en los hogares, también la desigualdad económica, ya que sólo 4 de cada 10 mujeres tiene un empleo formal, es decir, el 57 por ciento no tiene un empleo o no cuenta con un ingreso.
El gobierno de López Obrador ha desestimado que nosotras también somos un motor en la economía del país ya que aportamos casi 5 billones de pesos a las finanzas nacionales, es decir, una cuarta parte del PIB, sin embargo, la pobreza sigue teniendo rostro de mujer”.