“Cuando se trata de principios, cuando se trata de defender la democracia, cuando se trata de desenmascarar a hipócritas, siempre he dado mi punto de vista y no me importa lo políticamente correcto”.
Así de claro y contundente lo manifestó este martes durante su mañanera el presidente Andrés Manuel López Obrador, al continuar defendiendo al morenista Félix Salgado Macedonio, a quien el Instituto Nacional Electoral le refrendó la cancelación de su candidatura al gobierno de Guerrero.
En respuesta a la lluvia de preguntas planteadas sobre el tema, el mandatario no se anduvo por las ramas y sin medir consecuencias no descartó utilizar todo el poder político que considera tener en el cargo que ocupa y con el mismo tono sembró advertencias dirigidas a los consejeros del INE.
Un reportero preguntó lo siguiente: “¿Considera que esta eventual reforma (electoral) debería incluir una renovación total del consejo del INE, independientemente de que varios de ellos ya concluyen su periodo, y posiblemente achicar el organismo administrativamente?
Y así respondió López Obrador: “Sí, todo lo que ayude a que haya democracia. Que no haya simulación, que no haya injerencia de grupos de intereses creados, del poder político y del poder económico, que sea un órgano verdaderamente autónomo, independiente, pero realmente independiente”.
¿Actualmente no lo es?, insistió el reportero y con el mismo tono el Ejecutivo federal contestó con el mismo tono: “Yo no tengo confianza, yo le tengo confianza al pueblo. Lo que pasó en el 18 fue por el pueblo, porque la gente salió a votar y a cuidar el voto, pero yo he padecido de los de arriba, los padecí mucho, nos robaron la Presidencia, se prestaron al fraude, no veían nada, y por ello cuando se trata de principios, cuando se trata de defender la democracia, cuando se trata de desenmascarar a hipócritas, siempre he dado mi punto de vista y no me importa lo políticamente correcto”.