*Educación, una de las formas más idóneas de combatir la discriminación
Aunque existen muchas formas para atacar la discriminación, se considera a la educación como una de las más idóneas, pues permite no sólo el acceso a la profundización de conocimientos, sino que coadyuva poderosamente al rompimiento de patrones socioculturales de discriminación y desigualdad.
En la Ceremonia de Clausura de la maestría en Derecho Procesal Constitucional, que impartió la Universidad Panamericana, señalé que estamos convencidos de que no sólo la excelencia debe privar en el ejercicio profesional, sino también como una forma de promover la superación, en especial de las mujeres profesionistas.
La maestría es una herramienta de profesionalización y crecimiento personal, que les permitirá aspirar a nuevas y mejores oportunidades. De manera especial a las mujeres, a quienes las labores de crianza y cuidado en el hogar les dificulta o, por lo menos, les lleva a postergar esta decisión de continuar sus estudios en niveles superiores.